Ignacio
Ramonet
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Como si las vacaciones de verano fuesen un manto de olvido
que disipase la brutalidad de la crisis, los medios de comunicación han tratado
de distraernos con dosis masivas de embrutecimiento colectivo: Eurocopa de
fútbol, Juegos Olímpicos, aventuras estivales de 'famosos', etc. Desean
hacernos olvidar que una nueva andanada de recortes se avecina y que el segundo
rescate de España será socialmente más lastimoso... Pero no lo han conseguido.
Entre otras razones, porque los audaces aldabonazos de Juan Manuel Sánchez
Gordillo y el Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT) han roto el conjuro y
mantenido la alerta social. El otoño será caliente. >> Lire en français / Leggere in italiano