Miguel Manzanera [Especial para La Página] El titular de portada en el periódico deportivo
Marca del domingo 8 de septiembre no podía ser más claro:
Palo Olímpico. El Comité Olímpico Internacional (COI) se había reunido el día
anterior en Buenos Aires para tomar una decisión importante: elegir la ciudad
que va a recibir los Juegos Olímpicos de 2020. Allí se encontraba el lobby
español, compuesto por lo más significativo de las fuerzas vivas patrias: la
Casa Real con el príncipe y su esposa, además de la hermana del rey, la derecha
radical representada por la alcaldesa de Madrid y la derecha moderada por el
presidente del gobierno, etc. Nada pudieron frente a la indiferencia de los
delegados olímpicos. Madrid quedaba relegada al tercer lugar en las
preferencias como Villa Olímpica en 2020. Por tercera vez consecutiva se
rechazaba su candidatura.
“Tres pasiones, simples, pero abrumadoramente intensas, han gobernado mi vida: el ansia de amor, la búsqueda del conocimiento y una insoportable piedad por los sufrimientos de la humanidad. Estas tres pasiones, como grandes vendavales, me han llevado de acá para allá, por una ruta cambiante, sobre un profundo océano de angustia, hasta el borde mismo de la desesperación” — Bertrand Russell
10/9/13
Palo Olímpico | La izquierda ganará en Madrid las próximas elecciones.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)