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“La vida sólo puede ser comprendida mirando hacia atrás,
pero ha de ser vivida hacia adelante”: Kierkegaard, 1813-1855
La profundización de la crisis del euro, y de su sistema
bancario, preanuncia que una nueva etapa de la crisis mundial se está
incubando. Tal como señalaba hace menos de tres años en mi libro La tormenta
perfecta. Crisis económica global (septiembre 2009), cuando la crisis del dólar
era la que salía a escena, los coletazos de la crisis en los países centrales
afectan a los periféricos, como a Nicaragua, por el lado comercial o el lado
financiero, o por una combinación de ambos. La política de comercio exterior
fue tomando los recaudos para prevenirse de esos impactos, el incremento con su
comercio con Venezuela, aunque mantiene, hasta ahora, la política comercial de
ingresos ilimitados de productos importados; pero en materia financiera las
prevenciones fueron llegando con demora y en cuentagotas.
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