Gerardo Honty | BP
ha lanzado recientemente su informe 2015 de prospectiva energética [1] según el
cual la demanda de petróleo crecerá hasta alcanzar un volumen de 111 Mb/d
(millones de barriles diarios) en 2035, 19 Mb/d más que en la actualidad. Una
previsión similar a las presentadas en 2014 por la Agencia Internacional de la
Energía (OCDE) y la Energy Information Administration (EEUU). El bajo precio
actual del crudo a nivel internacional parece darle alas al sueño del aumento
indefinido del consumo. Pero a la vez parece ser su talón de Aquiles.
La caída del precio del petróleo de los últimos meses tiene
varias explicaciones posibles. Entre ellas: una disminución de la demanda
originada en la desaceleración de la economía global, el intento de los países
petroleros de mantener precios competitivos ante el empuje de las renovables,
el aumento de la oferta del petróleo no convencional de Estados Unidos, entre
otros.