Foto: Carlos Prieto |
Carlos
Prieto: Sonata para violonchelo,
Op. 8 - Zoltán Kodály |
Tras dar lectura a su discurso, Prieto aludió al compositor
ruso a quien conoció en persona y refirió también que estando en el Instituto
Tecnológico de Massachusetts en donde aprendía el idioma ruso, escuchó todas
sus obras que encontró conservadas en la fonoteca de ese instituto. Más tarde,
cuando estudió en la entonces Unión Soviética, recordó que volvió a encontrarse
con Shostakóvich, incluso, comió alguna vez con él.
En el texto, se trasluce no solo la admiración de Carlos
Prieto por Shostakóvich, sino también sus sentimientos respecto al intenso
drama que fue la vida del maestro ruso. Shostakóvich, según Prieto, conoció a
la vez el éxito y alabanza en el ámbito oficial soviético y vivió también la
repulsa de ser considerado más de un momento, como músico burgués y decadente.
El historiador mexicano Miguel León Portilla
(1926), fue el encargado de ofrecer un discurso de bienvenida a Prieto, y
expresó que sean muchos años los que colabore en tan noble institución. “Lo elegimos porque esta Academia en
paralelo con la Real Española y con otras hispanoamericanas, ha tomado la
decisión de incluir entre sus miembros a personas conocedores de otras ramas
del saber y de las artes”, expresó.
Dijo que haber elegido a Carlos Prieto como miembro de la
AML obedece a dos razones: porque se trata de un artista, un músico de
reconocida fama en México y fuera de él, y la otra, porque se trata de un personaje
que cultiva el arte del bien decir y de ellos dan testimonio sus diversos
libros. Calificó a Prieto como un personaje en el que concurren, “todos atributos de los grandes maestros que
vivieron en el tiempo del Renacimiento”.
Prieto ofreció un concierto que incluyó el estreno mundial
de la pieza “Sol Fa de Pedro”, del compositor novohispano Manuel de Sumaya. Se
trata de una pieza para chelo y piano, adaptada por el compositor Alexis
Aranda, quien realizó su transcripción; con una duración cercana a los seis
minutos.
Carlos Prieto es uno de los más destacados violonchelistas
del mundo, graduado en música por la Universidad Lomonosov de Moscú, ha
estudiado además con algunas de las más prestigiadas figuras y academias de la
música internacional, como son Imre Hartman y Pierre Fournier y la Juilliard
School of Music de Nueva York.