English |
Las impactantes actas relativas a la reunión, la semana
pasada, del presidente Putin con el Secretario de Estado de los EEUU, John
Kerry, revelan la “extrema indignación” de los dirigentes rusos con el régimen
de protección continua del presidente Obama hacia los gigantes mundiales de la
biogenética, Syngenta y Monsanto, frente a la inminente “apocalipsis de las
abejas” que, según el Kremlin, “con toda seguridad” puede conducir a una guerra
mundial.
Según dichas actas, publicadas hoy en el Kremlin por el Ministerio
de Recursos Naturales y Medio Ambiente de la Federación Rusa, Putin estaba tan indignado por
la negativa de Obama a discutir sobre este grave asunto, que durante 3 horas
incluso rechazó
reunirse con Kerry, quien había viajado a Moscú en misión diplomática,
cediendo después a fin de no provocar una ruptura aún mayor entre ambas
naciones.
En el centro de la disputa entre Rusia y los EEUU, según el
informe del MNRE, se encuentra la “indiscutible evidencia” de que un tipo de
insecticidas neuro-activos relacionados con la nicotina, y conocidos con el
nombre de neonicotinoides,
están destruyendo la población de abejas de nuestro planeta, y que, de no
controlarse, podrían destruir nuestra capacidad mundial para cultivar
suficientes alimentos para alimentar su población.
La situación se ha vuelto tan grave, informa el MNRE, que la
Comisión Europea al completo votó, la semana pasada, una prohibición cautelar
de 2 años (empezará el 1
de diciembre de 2013) para pesticidas “mata abejas”, siguiendo el ejemplo
de Suiza,
Francia, Italia, Rusia, Eslovenia o Ucrania, países que habían prohibido
anteriormente la utilización en el continente de estos peligrosos organismos
genéticamente alterados.
Dos de los más temidos neonicotinoides que ahora han sido
prohibidos son el Actara,y el Cruiser,
fabricados por el gigante suizo de las semillas y pesticidas biotecnológicos, Syngenta AG,
quien da empleo a más de 26.000 personas en cerca de 90 países y que ocupa el
tercer puesto del ranquin mundial de ventas en el mercado comercial de semillas
para la agricultura.
Es importante tener en cuenta, apunta el informe, que
Syngenta, junto a otros gigantes de la biotecnología como Monsanto, Bayer, Down
y DuPont, controlan actualmente
cerca del 100% del mercado mundial de pesticidas, plantas y semillas
genéticamente modificadas.
También es importante destacar en el caso de Syngenta,
continúa el informe, que en 2012 fue acusada penalmente en Alemania por
haber ocultado el hecho de que su maíz genéticamente modificado había matado
ganado, y que se haya establecido una demanda
colectiva por valor de 105 millones de dólares en EEUU después de
descubrir que había contaminado los suministros de agua de cerca de 52 millones
de estadounidenses en más de 2000 distritos con su herbicida Atracina, que
puede provocar cambios en el género de los animales.
Cómo de asombrosamente espantosa está la situación, se puede
ver, según el MNRE, en el informe realizado el pasado marzo por American Bird Conservancy (ABC), desde
el que se advierte del peligro
en el que se encuentra el mundo y en el que podemos leer lo siguiente:
“Como parte de un estudio sobre los efectos del tipo de insecticidas
más utilizado en el mundo, los neonicotinoides, la American Bird Conservancy
(ABC) ha hecho un llamamiento a la prohibición de su uso como tratamiento de
semillas, así como para la suspensión de todas las solicitudes a la espera de
una revisión independiente de los efectos de dichos productos en las aves,
invertebrados terrestres o acuáticos y el resto de animales salvajes”.
“Está claro que estos
químicos tienen el potencial para afectar a toda la cadena alimentaria. La
persistencia en el ambiente de los neonicotinoides, su propensión a los
vertidos e infiltraciones en las aguas subterráneas, así como su acumulativo, y
en gran medida irreversible, modo de actuar en los invertebrados plantea
problemas ambientales significativos”, dijo Cynthia Palmer, coautora del
informe y directora del Programa para Pesticidas del ABC, una de las
organizaciones líderes en EEUU para la conservación de las aves.
El ABC encargó al mundialmente reconocido toxicólogo
ambiental, Dr. Pierre Mineau, la dirección de la investigación. El informe de
100 páginas, “El impacto en las aves del insecticida más utilizado en el país”,
revisa 200 estudios sobre los neonicotinoides, incluyendo la investigación de
la industria obtenida a través de la Ley de libertad de información de los
EEUU. El informe evalúa el riesgo toxicológico para las aves y los sistemas
acuáticos e incluye comparaciones extensas con otros pesticidas anteriores que han
sido sustituidos por los neonicotinoides. La evaluación concluye que los
neonicotinoides son letales para las aves y para los sistemas acuáticos de los
que dependen.
“Un solo grano de maíz recubierto de neonicotinoides puede matar un
pájaro”, dijo Palmer. “Incluso un
ínfimo grano de trigo o colza tratado con el más antiguo de los neonicotinoides
– llamado imidacloprid – puede envenenar fatalmente a un ave. Tan solo una
décima parte de una semilla de maíz recubierta de neonicotinoides al día
durante la época de incubación puede afectar a la reproducción”.
El nuevo informe concluye que los niveles de contaminación
de los neonicotinoides, tanto en las aguas superficiales como las aguas
subterráneas, en los EEUU y en el mundo, están más allá del umbral conocido
para matar invertebrados acuáticos.
Después de este informe condenatorio, la MRNE dice que un
gran grupo de apicultores estadounidenses y medioambientalistas demandaron al
régimen de Obama por el uso continuado de estos neonicotinoides indicando:
“Vamos a llevar a la EPA (Environmental Protection Agency) ante los
tribunales por su fracaso en la protección de las abejas de los pesticidas. A
pesar de nuestro gran esfuerzo para alertar a la agencia sobre los problemas
que plantean los neonicotinoides, la EPA continuó ignorando las claras señales
de alerta de un sistema agrícola en dificultades”.
Y cómo de malo se ha vuelto el sistema agrícola mundial
debido a estas plantas, pesticidas y semillas modificadas genéticamente, se
puede ver, según el informe, en la propuesta de la EU de la semana pasada,
seguida de la prohibición de los neonicotinoides, en la que se propone
criminalizar prácticamente todas las semillas y las plantas no registradas en
la UE, y en la que podemos leer lo
siguiente:
“Europa se apresura a los buenos días de 1939, 40,… Una nueva ley
propuesta por la Comisión Europea podría ilegalizar el cultivo, la reproducción
o la comercialización de cualquier semilla vegetal que no haya sido probada,
aprobada y aceptada por una nueva administración europea llamada “Agencia de Variedades
Vegetales de la UE”.
La nueva Ley de Material Reproductivo de
las plantas de la EU nace con la intención de que sean los Gobiernos los
que se hagan cargo de prácticamente todas las plantas y semillas. Aquellos
jardineros que cultiven sus propias plantas a partir de semillas no reguladas
podrían ser considerados criminales según esta ley.
El informe de la MRNE señala que, a pesar de que esta acción
de la UE pudiera parecer acaso draconiana, es, sin embargo, totalmente
necesaria para purgar el continente de la continua contaminación de estas
“monstruosidades de semillas” criadas genéticamente.
Lo más desconcertante de todo, dice el MRNE, y aquello que
ha enfurecido a Putin, ha sido el esfuerzo del régimen de Obama por proteger
los beneficios de los productores de pesticidas por encima del daño
catastrófico al que se está exponiendo el medioambiente, y como detalla el
servicio de noticias de The Guardian en un artículo del 2 de mayo, titulado “Los
EEUU rechazan la alegación de la EU de los insecticidas como principal razón
del colapso de colonias de abejas”, en el que se puede leer:
“La UE ha votado esta semana a favor de una prohibición de 2 años para
un tipo de pesticidas, conocidos como neonicotinoides, que han sido asociados
al “colapso de las abejas”. El gobierno de los EEUU informa, por el contrario,
haber encontrado múltiples razones para el colapso de las colmenas”.
Para una razón “más verdadera” acerca de la protección de
Obama de los gigantes de la biotecnología en nuestro mundo, el MNRE dice que
puede leerse en este otro informe titulado “Cómo
Barack Obama se convirtió en el hombre de Monsanto en Washington”, y en el
que se llega a decir lo siguiente:
“Después de su victoria en las elecciones de 2008, Obama ocupó puestos
clave con gente de Monsanto en aquellas agencias federales que ejercen una
fuerza tremenda en temas de alimentación, la USDA y la FDA: en la USDA
colocó a Roger Beachy, antiguo director del Monsanto Danforth Center, como
director del Instituto Nacional de Alimentación y Agricultura; en la FDA,
colocó al nuevo Zar de las cuestiones de seguridad alimentaria, el infame
Michael Taylor, antiguo vicepresidente para políticas públicas de Monsanto,
como comisionado adjunto. Taylor había sido fundamental a la hora de conseguir
la aprobación de la hormona de crecimiento bovina de ingeniería genética de
Monsanto”.
Y peor aún, después de que Rusia
suspendiera la importación y uso del maíz modificado de Monsanto, tras
la lectura de un estudio que sugería su relación con el cáncer de mama el
pasado septiembre, el servicio de noticias de Russia Today informó
sobre la respuesta de Obama:
“La Cámara de Representantes de los EEUU aprobó la semana pasada a
última hora la incorporación en la Ley de asignaciones agrícolas de 2013 de una
disposición que protege las semillas genéticamente modificadas de litigios
frente a riesgos sanitarios.
La disposición, que se conoce oficialmente como la Farmer
Assurance Provision, ha sido ridiculizada por los opositores del lobby
biotecnológico como la “Monsanto Protection Act”, ya que despoja a los
tribunales federales de la autoridad para detener de inmediato la siembra y
venta de semillas genéticamente modificadas (OGM) al margen de la preocupación
de los consumidores por su salud.
La disposición, también denunciada como “cláusula
biotecnológica”, debería haber trascurrido por los comités de agricultura
o judicatura para su revisión. En cambio,no se celebraron sesiones y
el asunto era desconocido por la mayoría de los demócratas
(quienes detentan la mayoría en el Senado)antes de su aprobación
como parte del HR993, la ley de financiamiento a corto
plazo que se aprobó para evitar el derribo del gobiernofederal”.
El 26 de marzo, Obama
firmaba la Monsanto Protection Act, garantizando así que el pueblo
estadounidense no pueda recurrir contra el gigante de la biotecnología cuando
millones de ellos caigan enfermos, muchos de los cuales acabarán muriendo
seguramente en la que el informe del MRNE llama la mayor apocalipsis agrícola
en la historia de la humanidad, mientras el 90% de las abejas salvajes han muerto ya
en EEUU y cerca del 80% de las domesticas también.