 Los rusos han mejorado su sistema electrónico
y de vigilancia  instalado en Jabal Al
Harrah, estación localizada al sur de Damasco, frente del mar de Galilea, de acuerdo
con las informaciones suministradas por el portal israelí Debka, generalmente muy bien
informado y a través del cual se filtran los “secretos” que Israel y los
Estados Unidos desean difundir.
Los rusos han mejorado su sistema electrónico
y de vigilancia  instalado en Jabal Al
Harrah, estación localizada al sur de Damasco, frente del mar de Galilea, de acuerdo
con las informaciones suministradas por el portal israelí Debka, generalmente muy bien
informado y a través del cual se filtran los “secretos” que Israel y los
Estados Unidos desean difundir.
Esta
estación, a la que se le han añadido recursos e instrumentación de última
generación, persigue el fin  de darle a Irán
informaciones de alerta temprana ante un inminente ataque de EE UU o Israel, que
según Debka, provienen  de “fuentes
militares”.
La
estación cubriría los movimientos civiles y militares en el norte de Israel
hasta Tel Aviv, Jordania y el norte oeste de Irak. Hoy en día, su alcance se
extiende a todas las partes de Israel y Jordania, el golfo de Aqaba y el norte
de Arabia Saudita. 
La segunda parte del proyecto de Moscú para extender el alcance de sus oídos y los ojos en el Oriente Medio consistió en la actualización del radar de Siria. Rusia es ahora capaz de realizar un seguimiento de los movimientos aéreos y navales de Estados Unidos e Israel en el Mediterráneo oriental, incluyendo inclusive a Chipre y Grecia.
 
 
