“Tres pasiones, simples, pero abrumadoramente intensas, han gobernado mi vida: el ansia de amor, la búsqueda del conocimiento y una insoportable piedad por los sufrimientos de la humanidad. Estas tres pasiones, como grandes vendavales, me han llevado de acá para allá, por una ruta cambiante, sobre un profundo océano de angustia, hasta el borde mismo de la desesperación” — Bertrand Russell

2/6/12

Eric Hobsbawm está en La era de la revolución

La era de la revolución es la primera parte de la interesante trilogía que Eric Hobsbawm dedicó a la historia del siglo XIX, que es una referencia para especialistas en historia, pero también para aquellos que quieran conocer la historia del siglo XIX.

Los Marxistas Británicos

Eric Hobsbawm, uno de los historiadores vivos más influyentes, perteneció al grupo de los Marxistas Británicos, preocupados por ofrecer una visión crítica de la historia y del capitalismo, como también hiciera la escuela francesa de Annales. Junto a otros investigadores como E.P. Thomson o Christopher Hill y en torno a la revista Past and Present, se interesaron por una visión de la historia “desde abajo” protagonizada por el hombre común y no por los grandes acontecimientos políticos. Sus obras incluían estudios sobre el movimiento obrero, los campesinos o los primeros movimientos políticos y sociales de la historia contemporánea como el ludismo y el cartismo.

La doble revolución

En el libro Hobsbawm plantea su famosa teoría de la doble revolución, es decir, la Revolución Francesa y la Revolución Industrial son la vertiente política y económica de un mismo fenómeno, el cambio brusco e inédito en la historia de la humanidad que abre las puestas del mundo contemporáneo y conduce al triunfo de un sistema económico, el capitalismo y de una clase social, la burguesía. Un nuevo mundo cada vez más urbanizado, mejor conectado, con una capacidad casi ilimitada de producir bienes y servicios, pero también un mundo desigual económicamente, expuesto a crisis cíclicas y todavía incapaz de integrar políticamente a las nuevas clases sociales surgidas de la revolución industrial.

Una visión diacrónica

El periodo que cubre el libro, 1789-1848, es analizado por Hobsbawm desde un punto de vista no tradicional ya que explica por separado aspectos económicos, sociales, políticos, las artes. la ciencia o la religión, en lugar de elaborar un relato sincrónico y lineal. Hobsbawm consigue una magistral visión de conjunto del periodo gracias a su erudición, que le ayuda a sostener sus hipótesis sobre numerosas citas y datos estadísticos, y a su talento como narrador, que convierte la obra en un relato vivo y apasionante de esta época fundamental.

Las raíces de nuestro sistema económico, político y de nuestra sociedad analizadas con rigor, inteligencia y narradas con elegancia y erudición

Principales aportaciones

Como hemos señalado Hobsbawm desarrolla una teoría en la que los cambios políticos, económicos y sociales que se producen durante este periodo pueden ser considerados como una doble revolución: ecónomica, gracias al triunfo del capitalismo industrial, y política, con las revoluciones liberales ocurridas en el mundo occidental.

Para la elección de este periodo (1789-1848) se basa también en los límites temporales de ambas revoluciones, ya que el autor considera que el primer despegue del gran desarrollo industrial británico comienza en la década de 1780 y concluye con la primera de las crisis sistémicas del capitalismo, en 1848. Mientras que la Revolución Francesa de 1789 inaugura un gran ciclo revolucionario en el que pueblo y burguesía forman coalición frente al tradicional poder de la aristocracia, ciclo que concluye con las revoluciones europeas de 1848, en las que la clase burguesa acabará por dar la espalda al pueblo y a un incipiente proletariado y se mostrará reacia a profundizar en las reformas democráticas.

Sin embargo Hobsbawm no se muestra excesivamente determinista (al contrario que otros autores marxistas) al relacionar cambios económicos y políticos, sino que da una visión de conjunto del periodo dando un importante peso a factores como los movimientos sociales, la religión, la ciencia o el arte.

Un libro imprescindible

La Era de la Revolución, hoy en día un clásico de la historiografía, es un libro no sólo imprescindible para cualquier estudioso de la Historia, sino muy recomendable para cualquier persona que quiera acercarse a uno de los periodos que mejor nos ayuda a conocer nuestro presente. Las raíces de nuestro sistema económico, político y de nuestra sociedad analizadas con rigor, inteligencia y narradas con elegancia y erudición.