Al noroeste de Irán, entre dos colinas, se encuentra el
peculiar cementerio de Khalid Nabi o Kalat Nabi, famoso por su monumentos
funerarios en forma de falo y vulva. Lo singular de las formas de sus tumbas ha
llevado a que en los últimos tiempos el cementerio se haya convertido en una
atracción para el turismo. Sin embargo, la mayoría de empresas turísticas no
suelen realizar visitas a este lugar, dado su emplazamiento tan alejado de
otros puntos de interés; por otro lado, el cementerio se inscribe en una región
de restrictivas normas respecto a la conducta sexual y a cualquier
manifestación que haga referencia a la misma, razón por la cual el cementerio
ha sido víctima de diferentes agresiones, a pesar de estar protegido y
reconocido como Patrimonio Nacional de Irán.
La necrópolis se localiza en la provincia del Golestán, muy
cerca del actual Turkmenistán. Según la tradición, en este cementerio fue
enterrado el profeta precristiano Khalid Nabi, motivo por el que es un punto de
peregrinación de los fieles musulmanes, por lo general mujeres que buscan su
bienestar y que dejan como ofrenda en el lugar lazos atados a árboles.