Lea más abajo una nota curiosa |
"Estoy
compungido", dijo el autor estadounidense A.J. Jacobs, que intentó
leerse los 32 tomos de la enciclopedia para uno de sus libros, " El
sabelotodo”. Jacobs valora la concreción de la edición impresa, la idea de que "todo el conocimiento del mundo podía
guardarse en esos tomos", que han marcado la vida de muchas personas.
El explorador irlandés Ernest Shackleton se llevó un volumen
de su Encyclopaedia Britannica (el
nombre original, en latín) en su famosa expedición a la Antártida a principios
del siglo XX y se cuenta que quemó una a una sus páginas para calentarse. "Esto
no se puede hacer con internet", apostilla A.J Jacobs.
La Encyclopaedia Britannica empezó a publicarse en Edimburgo
(Escocia) en 1786 y, tras pasar por las manos de varios editores británicos, en
1902 la edición se trasladó a Estados Unidos, donde empresarios de ese país
redujeron el tamaño de los artículos e introdujeron la venta a domicilio. Desde
1996, la empresa es propiedad del millonario suizo Jacqui Safra y, aunque su
sede sigue estando en EEUU, el tipo de inglés que se emplea en los textos en
eminentemente británico.
Además de la enciclopedia, la compañía produce desde hace
años material didáctico para escuelas y otros productos que son la base de sus
ingresos y que compensaron la caída de las ventas de su obra más emblemática,
de 120.000 colecciones en 1990 a solo 8.500 en 2010. Tras varias décadas en las
que se complementó la edición impresa con contenidos digitales, la Enciclopedia
Británica empieza ahora una nueva aventura en internet.
No es ningún secreto que en la red se enfrentará a
gigantescos oponentes como la Wikipedia, que ofrece un servicio gratuito frente
a los 80 dólares anuales que cobrará la obra enciclopédica. La Enciclopedia
Británica, que ha sido adquirida por países como Irlanda o Finlandia para sus
sistemas educativos, quiere competir aportando "mayor rigor", ya que
sus editores, señala, son profesionales especializados.
La Encyclopaedia Britannica cuenta con cien editores en la
plantilla más miles de colaboradores en todo el mundo que someten las
aproximadamente 100.000 entradas de la obra (frente a 3,7 millones de la
Wikipedia) a una revisión constante.
Pese a ese exhaustivo control, ambos reconocen que no se
puede garantizar precisión absoluta, aunque se ha mejorado desde que en siglos
pasados sus artículos fueron en ocasiones criticados por desfasados, burgueses,
racistas o sexistas. Al cerrar su etapa impresa con su edición número 15, la
Enciclopedia Británica deja entre sus páginas las contribuciones de destacados
intelectuales de todos los tiempos, como Sigmund Freud, Albert Einstein, Marie
Curie o Leon Trotsky
Omar Montilla |
Nota del
Editor
Con mucho tiempo libre en sus manos (y tinta en su
impresora) Rob Matthews tomó solo 437 artículos destacados de Wikipedia
transformándolos en un libro de papel y tinta de 5.000 páginas que mide 48,3 cm
de alto. Se estima que los 3 millones de artículos que contiene Wikipedia
equivalen a 952 volúmenes de la Enciclopedia Británica.
El libro que se imprimió representa el 0,01% del total del
contendido Wikipedia y lo tituló como “Lo Mejor de Wikipedia”; se rumorea que
él tiene planes de vender este libro.