El Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) adoptó
una decisión "sin precedentes" por el monto. Multó a la empresa
Fripur con 1.600.000 pesos (cerca de 80.000 dólares). La sanción fue por lo
archisabido: violar todas las normas laborales y por llevar adelante una
sistemática represión sindical. Se trata de los mismos patrones que mantenían
en situación de semiesclavitud a las trabajadoras bolivianas en su mansión de
Carrasco. Los mismos patrones que pagan la banda presidencial del jefe
tupamaro, le "prestan" un Volvo a Tabaré Vázquez o ceden su avión
familiar para los viajes de Mujica-Astori. Los mismos patrones que se
benefician de la "asociación público-privada" en los negocios,
proveyendo -a través de Frimara, otra de sus empresas- los infames contenedores
de acero donde el Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU) encierra
y tortura a los "jóvenes infractores".
Los partidarios del Frente Amplio se deben sentir aliviados
en su maltrecha conciencia. En el reino del progresismo no habría lugar para
"intocables". Ni siquiera para los burgueses del clan Fernández. Como
debería ser bajo el "gobierno de izquierda" que votaron. Un espejismo
sin duda, pero que sostiene la hipnosis.
























