Revelaciones recientes en los medios de información sobre
abusos de los proveedores de Apple han reavivado el debate público sobre China
y los costes humanos de la globalización. Entretanto, el Presidente
Obama, preocupado por el empleo en un año electoral, ha pedido que China juegue
limpio en el comercio internacional y mejore su comportamiento en derechos
humanos.
China ha sido un vehículo para la creación de una
globalización basada en bajos salarios y bajas normas de trabajo que ha costado
muchos puestos de trabajo a Estados Unidos.