Che Guevara ✆ José Antonio Echavarría |
En línea con todo lo anterior, en el texto arriba citado el Che hace una mención a los intelectuales, que quiero compartir con todos ustedes. Está hablando de su papel en Cuba, en la Cuba revolucionaria; pero el fondo de su argumento va más allá y es pertinente para comprender también al papel y las contradicciones de los intelectuales latinoamericanos en el momento actual. Sobre todo de los intelectuales en países como Bolivia, Ecuador y Venezuela, comprometidos con la construcción del socialismo del siglo veintiuno y de sus homólogos en países que sin proponerse sus gobiernos esas metas atraviesan -como Argentina, Brasil y Uruguay- por procesos de cambio cuyos reflejos en el plano internacional los acercan a los primeros. Por eso es que los invito a reflexionar sobre sus sabias palabras al cumplirse los cuarenta y seis años de su cobarde asesinato.
“Resumiendo, la culpabilidad de muchos de nuestros intelectuales y artistas reside en su pecado original; no son auténticamente revolucionarios. Podemos intentar injertar el olmo para que dé peras, pero simultáneamente hay que sembrar perales. Las nuevas generaciones vendrán libres del pecado original. Las posibilidades de que surjan artistas excepcionales serán tanto mayores cuanto más se haya ensanchado el campo de la cultura y la posibilidad de expresión. Nuestra tarea consiste en impedir que la generación actual, dislocada por sus conflictos, se pervierta y pervierta a las nuevas. No debemos crear asalariados dóciles al pensamiento oficial ni «becarios» que vivan al amparo del presupuesto, ejerciendo una libertad entre comillas. Ya vendrán los revolucionarios que entonen el canto del hombre nuevo con la auténtica voz del pueblo. Es un proceso que requiere tiempo.”¡Hasta la victoria siempre, Comandante Che Guevara!