“Tres pasiones, simples, pero abrumadoramente intensas, han gobernado mi vida: el ansia de amor, la búsqueda del conocimiento y una insoportable piedad por los sufrimientos de la humanidad. Estas tres pasiones, como grandes vendavales, me han llevado de acá para allá, por una ruta cambiante, sobre un profundo océano de angustia, hasta el borde mismo de la desesperación” — Bertrand Russell

28/12/14

La derrota de la Armada española en Cuba en la Guerra de los Cien Días

Voladura del USS Maine en La Habana
Esteban Mira Caballos
La guerra de los Cien Días –aunque duró exactamente 113 días- entre España y Estados Unidos fue provocada directamente por estos con la intención de apoderarse de la isla. El 15 de febrero de 1898, el crucero Maine, amarrado al puerto de La Habana, voló por los aires. Siempre se sospechó que lo hundieron los propios norteamericanos para provocar la guerra y, aunque ellos siempre lo negaron, recientemente gracias a la desclasificación de papeles de la guerra se ha confirmado tal sospecha. Y ello, porque hacía años que negociaban infructuosamente la venta de Cuba por España. El objetivo estaba claro, se trataba de expulsar a la vieja potencia de Cuba, Puerto Rico y Filipinas para así expandir su dominio político y económico al Caribe y al Pacífico. El 24 de abril de 1898 España se ve forzada a declarar la guerra, al tiempo que el presidente estadounidense Willian McKinley ordenaba a la flota de W. Sampson el bloqueo La Habana.

El almirante Pascual Cervera y Topete ha pasado a la historia como el héroe que se enfrentó a la armada estadounidense a sabiendas de que se dirigía a una muerte segura. Su lealtad a la bandera y a la patria, su espíritu de sacrificio le empujo a luchar en condiciones desiguales antes que rendir sus barcos amarrados al puerto de Santiago de Cuba.