“Tres pasiones, simples, pero abrumadoramente intensas, han gobernado mi vida: el ansia de amor, la búsqueda del conocimiento y una insoportable piedad por los sufrimientos de la humanidad. Estas tres pasiones, como grandes vendavales, me han llevado de acá para allá, por una ruta cambiante, sobre un profundo océano de angustia, hasta el borde mismo de la desesperación” — Bertrand Russell

8/9/16

Charles Baudelaire, estilo eterno y poética maldita

Charles Baudelaire
Frantisek Kupka
Vivió tan sólo 46 años, pero su vida fue vertiginosa, poética, vil y miserable. Se cumplen 149 años de que Charles Baudelaire, el “maldito” que quiso extraer belleza del mal, descendía a los infiernos.
Mara Chávez
Charles Baudelaire nació en París un 9 de abril de 1821 en pleno Barrio Latino. La muerte de su padre, con quien era muy cercano, a muy temprana edad transformará su niñez y adolescencia en un camino de incomprensión y soledad. Crece en un ámbito familiar hostil, lleno de odio y rencor hacia su padrastro, quien era militar y quien controlará el destino del poeta durante sus primeros años. Según la crítica, se conoce su participación dentro de la revolución de 1848 donde se lo vio armado en las barricadas (y hay quienes dicen que su viva participación se debía al odio hacia su padrastro, quien representaba la viva imàgen de la burguesía conservadora del viejo París).

El poeta recorrió distintos colegios, de los cuales en muchos casos fue expulsado por indisciplina. En sus primeros años de juventud frecuenta círculos del Barrio Latino de París, se acerca a las lecturas de Nerval y Balzac, consume estupefacientes y comienza una vida bohemia y libertina. Allí conoce a Sara Louchette, prostituta y musa, de quien se contagia sífilis, enfermedad que años más tarde acabará con su vida.