“Tres pasiones, simples, pero abrumadoramente intensas, han gobernado mi vida: el ansia de amor, la búsqueda del conocimiento y una insoportable piedad por los sufrimientos de la humanidad. Estas tres pasiones, como grandes vendavales, me han llevado de acá para allá, por una ruta cambiante, sobre un profundo océano de angustia, hasta el borde mismo de la desesperación” — Bertrand Russell

28/6/12

Ollanta Humala / ¿Gran traición o desenmascaramiento?

Miguel Aragón

1. Con fecha 04 de junio el veterano “hayista” [*] César Vásquez Bazán publicó una caricatura con el título de Gran Transformación se convirtió en la Gran Traición de Ollanta Humala. Para este redomado e incorregible aprista, el gran problema del Perú es “la gran traición de Ollanta Humala”. Al día siguiente, 05 de junio, el joven “antiimperialista” Guillermo Bermejo por su parte publicó un artículo suyo titulado Ollanta y la Gran Traición (que lo trascribimos más abajo).Recién nos ha llegado y recién nos hemos informado de este lastimero artículo, que termina por desnudar al joven “antiimperialista”. (Agradecemos a John Ochoa por reproducir el artículo de marras, acompañando su último documento de deslinde).


Es conocido, que desde hace varias semanas, e incluso de unos pocos meses atrás, los veteranos Carlos Tapia y Sinesio López, y algunos periodistas del diario La Primera, también nos vienen hablando y denunciando “el estancamiento”, “el cambio”, “el viraje a la derecha”, e incluso “la traición” de Ollanta Humala. Más adelante, si nos queda tiempo y espacio, intentaremos encontrar cual es la interrelación existente entre los cuatro nacionalistas burgueses mencionados más arriba: C. Vásquez, C. Tapia, S. López y G. Bermejo.

Golpe de Estado en Paraguay / Torcer la voluntad de millones mediante una maniobra espuria revestida de legalismo

Álvaro Cuadra

Especial para La Página
Lo acontecido en Paraguay viene a ratificar que las democracias latinoamericanas siguen siendo febles. Sea que se trate de asonadas militares o de enjuagues parlamentarios, lo cierto es que los Golpes de Estado siguen siendo un riesgo en la región. Hace muy poco nos conmovió Honduras, más tarde fue Ecuador y hoy el hedor antidemocrático se ha instalado en Asunción. En todos los casos la misma patética inoperancia y demagogia de la OEA, en todos los casos, el silencio cómplice de Washington. Se intenta abortar un proceso democrático progresista usurpándole a un pueblo su voluntad soberana mediante un “golpe parlamentario” apoyado tácitamente por la cúpula militar y los poderes fácticos del Paraguay.

Lo acontecido en este pequeño país sudamericano liderado por el gobierno democrático de Fernando Lugo enciende una alerta continental, pues si los golpistas imponen sus términos, ello pone en entredicho toda la institucionalidad regional – UNASUR, MERCOSUR -  comprometida en la defensa de la democracia. La debilidad frente al actual régimen paraguayo que desconoce la voluntad popular expresada en las urnas solo legitima y alienta la posibilidad de repetir experiencias análogas en otras latitudes de nuestra región.