“Tres pasiones, simples, pero abrumadoramente intensas, han gobernado mi vida: el ansia de amor, la búsqueda del conocimiento y una insoportable piedad por los sufrimientos de la humanidad. Estas tres pasiones, como grandes vendavales, me han llevado de acá para allá, por una ruta cambiante, sobre un profundo océano de angustia, hasta el borde mismo de la desesperación” — Bertrand Russell

21/5/12

Nikola Tesla / El problema de cambiar el mundo

“El trabajo del hombre de ciencia es como el del labrador: para el futuro. Vive y trabaja y mantiene la esperanza.” Nikola Tesla, 1900
“Hoy, aturdidos después de varios siglos por el orgullo de la técnica, hemos olvidado que existe un orden divino del universo. Ignoramos que el trabajo, el arte, la ciencia, son tan sólo diferentes modos de entrar en contacto con ese orden. Si la humillación de la desgracia nos despertara, si encontráramos esta gran verdad, podríamos borrar lo que constituye el gran escándalo del pensamiento moderno: la hostilidad entre ciencia y religión.”: Simone Weil, 1934
Mailer Mattié
Venezuela
Todos somos uno

El rumbo que tomó la civilización industrial durante el siglo XX demandó ignorar los valores y la concepción del mundo implícitos en el legado de NiKola Tesla,1 representado, no obstante, en prácticamente todos los ámbitos de la tecnología actual; se afirma, inclusive, que hasta los ingenieros que egresan de las universidades lo desconocen. Afortunadamente, creamos o no, hemos iniciado un prometedor período de recuperación del conocimiento a todos los niveles, cuya característica principal es la tendencia cada vez mayor a buscar la unidad posible entre modernas y antiguas sabidurías: un camino indispensable para hallar soluciones permanentes al futuro de la humanidad. En este contexto, emerge con toda su lucidez la amplitud y profundidad del pensamiento de Tesla cuya vertiente social, inseparable de su carácter científico y técnico, constituye un aporte insustituible en nuestro convulso tiempo.

La guitarra del maestro César Portillo de la Luz

Foto: César Portillo de la Luz
[Album Noche Cubana]
Marta Valdés
Cuba
César Portillo de la Luz cumple noventa años. Pienso en él a propósito del protagonismo que, tanto la guitarra como los demás instrumentos de cuerda pulsada que se utilizan en la interpretación de nuestra música popular. Pienso en la guitarra trovadora -como él mismo la llama en su Canción para ese día–. Me detengo en su discurso acompañante concebido para la canción que aparece aquí a manera de ilustración. [Hay un video más abajo]

La guitarra de Portillo no se caracteriza por el desglose tradicional de los acordes, los arpegios o el adorno punteado que tan profusamente penetró en nuestra rutina acompañante a partir del auge de los tríos mexicanos encabezados por Los Panchos Y hago una excepción al recordar dos muestras más que originales, legendarias ambas: los Hermanos Rigual y el Trío Taicuba. A partir de  modelos insólitos declarados por el propio autor de Contigo en la distancia en una conversación alrededor del tema: los guitarristas -respectivamente– del Quinteto de Benny Goodman, y del Trío de Nat King Cole.
Delirio / Autor: César Portillo de la Luz
Intérpretes: Los Ángeles Negros - Canta: Ismael Montes

Psicología del Consumo

Especial para La Página
Eduardo Zeind Palafox

Cualquier estudiante inteligente, dice el brillante Samuelson, desearía conocer cuáles son los principios de la Economía Moderna.

Mexico
¿Por qué? Porque más allá de la mercadotecnia, de la publicidad, de la administración o de la ingeniería (técnicas usadas por las empresas), existen fenómenos sociales que determinan nuestra conducta a la hora de elegir lo que vamos a comprar. Ignorar la economía (teoría económica y teoría política) es ignorar lo que sucede allá afuera, allá en el mundo real, en el mundo de sudor, esfuerzo, trabajo e inseguridad, mundo contrario, muchas veces, al de las agencias de publicidad, hechas de cristal, aluminio y sueños.

Vamos a hablar, brevemente, sobre seis grandes postulados de la Economía Moderna. Iniciemos.