“Tres pasiones, simples, pero abrumadoramente intensas, han gobernado mi vida: el ansia de amor, la búsqueda del conocimiento y una insoportable piedad por los sufrimientos de la humanidad. Estas tres pasiones, como grandes vendavales, me han llevado de acá para allá, por una ruta cambiante, sobre un profundo océano de angustia, hasta el borde mismo de la desesperación” — Bertrand Russell

1/2/15

El Socialismo del Siglo XXI – ¿Una nueva o vieja alternativa para una América Latina globalizada?

“Tan idealista sería querer construir el socialismo imaginando al dinero corriendo como loco detrás del hombre, como absurdo, y puede decirse que antimarxista sería concebir al hombre corriendo como loco detrás del dinero […] El revolucionario tiene un concepto mucho más elevado del hombre, ve al hombre no como una bestia, considera al hombre capaz de formas superiores de vida, formas superiores de conducta, formas superiores de estímulos. El revolucionario cree en el hombre, cree en los seres humanos. Y si no se cree en el ser humano, no se es revolucionario.” Fidel Castro
Amanecer ✆ Pablo Picasso

Fabián González-Ramírez
En este ensayo pretendo hacer una reflexión sobre una interrogante cuya respuesta aún resulta lejana y complicada: ¿puede constituir el Socialismo del Siglo XXI una nueva y viable alternativa latinoamericana ante el contexto de la globalización? Para ello se analizan diversas posturas teóricas y se enfoca, en los nuevos movimientos sociales, una alternativa del Sur Global.

Introducción

Al hacer una contextualización, es un hecho que la década de 1970 fue económicamente crítica. Los precios internacionales del petróleo aumentaron de manera precipitada, debido a las decisiones de los países árabes miembros de la OPEP para implementar una estrategia de revalorización del crudo, así como la negativa de exportación a los países que apoyaron a Israel durante la Guerra de Yom Kippur.

Historiografía y movimientos sociales en El Salvador [1811-1932] – Un balance preliminar

José Feliciano Ama,
líder de la insurrección de 1932
Carlos Gregorio López Bernal
Este trabajo pretende hacer un balance historiográfico preliminar sobre el estado de los estudios sobre movimientos sociales en El Salvador, de 1811 a 1932. Para seleccionar los casos de estudio se procedió a partir de dos criterios básicos: primero, la importancia que tuvo la movilización, tanto en el momento de su acaecimiento como en la historiografía salvadoreña; segundo, la cantidad y calidad de los estudios al respecto, considerando tendencias historiográficas, abordajes, fuentes e interpretaciones. Se discuten los factores que a lo largo del tiempo han condicionado las diferentes interpretaciones sobre los mismos hechos.

Los movimientos sociales en América Latina se asocian con los momentos de mayor intensidad de la conflictividad social, independientemente de cómo esta se manifieste. Esta es la tesis que subyace, por ejemplo, en la sugerente compilación de estudios que hizo Fernando Calderón a mediados de la década de 1980. La emergencia de movilizaciones sociales se relaciona con crisis que provocan o agravan los problemas sociales y que impulsan a la organización de distintos actores.

Fernando Calderón define los movimientos sociales como: “acciones colectivas con alta participación de base, que utilizan canales no institucionalizados y que, al mismo tiempo que van elaborando sus demandas, van encontrando formas de acción para expresarlas y se van constituyendo en sujetos colectivos”.1 La definición de Calderón es lo suficientemente amplia como para dar cabida a los casos que aquí se estudiarán, en tanto ve el problema como proceso, abre la posibilidad de un estudio en perspectiva histórica.