“Tres pasiones, simples, pero abrumadoramente intensas, han gobernado mi vida: el ansia de amor, la búsqueda del conocimiento y una insoportable piedad por los sufrimientos de la humanidad. Estas tres pasiones, como grandes vendavales, me han llevado de acá para allá, por una ruta cambiante, sobre un profundo océano de angustia, hasta el borde mismo de la desesperación” — Bertrand Russell

23/7/15

El Esequibo y algo más

Guayana Esequiba: se juega el futuro de Venezuela
Está en juego algo más que el rescate del  Esequibo
¿Preservaremos la salida de Venezuela al Atlántico?

Gustavo Márquez Marín   |    A la diplomacia venezolana le toca actuar con mucha agilidad, prudencia y firmeza para desmontar el plan del  Departamento de Estado que busca sacar fuera del ámbito diplomático, del Acuerdo de Ginebra (1966), de las negociaciones bilaterales facilitadas por el “buen oficiante” designado por la ONU, el diferendo limítrofe venezolano-guyanés sobre el Esequibo. Para lograrlo, quiere provocar un conflicto entre Guyana y Venezuela  en el  cual actuaría como doliente y aliado del gobierno de Mr. Grange, porque estaría  comprometida “su seguridad nacional” al afectarse los intereses de la ExxonMobil. A esta le fue asignada ilegalmente una concesión petrolera (Bloque Stabroek), en un área marítima correspondiente al territorio en reclamación, extendida hacia la plataforma del Delta del Orinoco, invadiendo la fachada atlántica venezolana.