Entre la evolución y la revolución: la long durée de la felicidad humana ✆ Jon Juanma |
Especial para La Página |
Después de casi 4 años sin realizar una “gran” óleo, es para
mí una alegría muy grande poder compartir con vosotros mi última creación. El
título de la misma es ‘Entre la evolución y la revolución: la long durée de la felicidad humana’. Deseo que la
pintura sea de vuestro agrado.
Jon Juanma |
En esta obra he querido “hablar” de la evolución del
homínido, los antecedentes del ser humano, nuestras semejanzas con chimpancés y
bonobos, etc. Ello como principio. Y dentro del largo camino de la evolución,
la revolución como fin y necesaria (r) evolución (nueva evolución) del homo
sapiens. En la pintura intento expresar la necesidad urgente del socialismo
para la raza humana, que es una, tal y como señalan los antropólogos progresistas.
Por ello, por encima de supuestas razas y nacionalidades, que la más de las
veces se utilizan como barreras semióticas para separarnos de nuestros
objetivos compartidos, he intentado subrayar la unidad del género humano y su
necesario camino hacia la liberación. Su vía hacia la sociedad donde ya no
competiremos lxs unxs con lxs otrxs sino que caminaremos juntos hacia la mayor
libertad posible y el fin de la opresión.
Y entre medías la felicidad, con y sin ironía. Felicidad
atrapada en nuestra tensión permanente entre nuestra parte animal, irracional y
subconsciente frente a todo lo bueno que la cultura humana ha desarrollado (el
saber escrito, la música, las artes plásticas, etc.) con un homenaje a la parte
positiva que tuvo el Neolítico en cuanto al dominio de la agricultura. En la
obra hay un homenaje continuo hacia la tierra, la cual es origen junto con el
trabajo y la actividad humana, de la totalidad de productos con los cuales nos
alimentamos materialmente y espiritualmente.
El óleo está realizado sobre una tela de 160 x 90 cm y
pronto, por supuesto, espero tenerlo en sociorreproducción para que las más
amplias mayorías puedan tenerlo en casa. También lo coloco aquí a una
resolución decente (aunque menor que una sociorreproducción) por si queréis
libremente imprimirlo y decorar vuestro entorno. La técnica empleada, a
diferencia de otras ocasiones, no ha sido el método flamenco de veladuras y
capas que data de Van Eyck en el siglo XV, sino que he llegado a un
procedimiento mixto entre los flamencos posteriores (como por ejemplo Van Dyck)
y algunos procedimientos propios de pintores del siglo XX como Dalí o Rivera,
Josep Renau o Joan Castejón. En no pocas zonas he utilizado los dedos y
deliberadamente he querido remarcar los contornos de forma un tanto
antinaturalista para darle expresividad y un mayor peso perceptivo a los
personajes. Como podréis comprobar sigo con mis tonalidades agresivas y
eléctricas y el cuadro se caracteriza por un gran colorido. He intentado que
fuera una composición estructuralmente armónica, tanto formal como
psicológicamente, pero con puntos centrífugos de mayor atención y tensión
dramática. Espero de corazón que el resultado sea de vuestro agrado.
Agradecimientos
Para acabar deseo expresar mi agradecimiento especial, por
su ayuda e inspiración, a la bellísima Silvia. Junto a ella a mis inseparables
Víctor G., David, Juan, Víctor A, mi padre, mi madre y mi hermana. También a mi
querido Gary Moore, que espero descanse en paz. El cual junto a otros
grandísimos músicos me han regalado la inspiración necesaria para seguir
adelante. Y por último, un recuerdo especial para Hilda Velásquez que sé lleva
mucho tiempo esperando mi nuevo cuadro: gracias por creer en mi trabajo y tener
paciencia todos estos años. También envío un agradecimiento muy especial para
Raquel Páez y Fernando Calzoni, que aunque separados por un océano, son dos
personas que todavía tienen la suficiente sensibilidad para seguir tomándose el
arte muy en serio. También a todos los que en cualquier parte del mundo luchan,
y lucharon, por el socialismo mundial. Gracias a unxs y a otrxs, para vosotrxs
un abrazo enorme, que en nada colma todo lo que me habéis regalado durante
todos estos años.