Terraza del café de la Place du Forum en Arles por la noche ✆ Vincent van Gogh [Ampliar] |
Especial para La Página |
Lo antropológico (individuo) debe convertirse en algo social
(grupo humano), lo matemático en algo físico (cantidad en cualidad), lo
psicológico en algo pedagógico (lo profundo se hace superficial) y lo histórico
en una crítica (lo viejo debe parecer recién encontrado, como enseñó Paul Valéry).
Vamos a dividir una obra de arte en dos partes. La primera
estará destinada a "producir" sentimientos, mientras que la
segunda a "encontrar"
sentimientos. Uno de mis pintores preferidos es Vincent Van Gogh. Tomemos su
óleo sobre lienzo llamado ‘Terraza del
café de la Place du Forum en Arles por la noche’, de 1888.
No me complicaré la existencia meditando esencias, pues la
gran crítica de arte sostiene lo siguiente: valen más las palabras concretas
que las palabras vacías. El arte es abstracto, es vacío de por sí, y hay que
interpretarlo con la voluntad, que es una de las tantas formas del pensamiento,
como diría mi dilecto B. Spinoza. El arte es "la impersonalidad racional"
tomando "conciencia".
¿Cuáles son los recursos que tiene el pintor para producir o
para encontrar emociones? El pintor puede sumar elementos (hombre más mujer:
amor), combinar físicamente objetos (mezclar la luz de un farol con la luz
refleja de la luna, como en una poesía de Belisario Roldán) o referirse a
paradigmas sociales o psicológicos (como Chesterton, que usaba las motivaciones
de la religión para urdir acertijos metafísicos).
En la pintura de Vincent vemos un cielo estrellado que
comunica nostalgia o muerte crepuscular, es decir, muerte en ciernes. ¿Qué hizo
Van Gogh para lograr la nostalgia y la tristeza? Hizo del
"objeto-esencia" "cielo" un "todo" organizado,
hizo que sus estrellas, que justamente "sus" estrellas tuvieran que
vivir justamente en "ese" cielo.
Van Gogh no se conformaba con atraer la pura percepción (‘percipi’
o percibir) del público , pues buscaba siempre que el público conociera (‘percipiens’
o conocimiento activo) de manera "maciza" los objetos que pintaba.
¿Qué es un conocimiento "macizo" de los objetos? Es conocerlos justo
en su mundo ('Dasein'), justo sobre el carril sobre el que pueden aparecer.
Pero Sartre lo dice mejor ('El ser y la nada'): "El pensamiento moderno [o
la pintura moderna] ha realizado un progreso considerable al reducir lo
existente a la serie de las apariciones que lo manifiestan".
Qué dolor nos causa ver un cielo íntegro, sólido o que no
nos necesita (sublime, diría Kant), y qué dolor nos causa ver fragmentos de luz
dispersos o estrellas sobre la integridad de la oscuridad. ¿En la anterior y
confusa reflexión encontramos o producimos un sentimiento? Cuando dos elementos
de distinta especie se unen se producen sentimientos, se hace una síntesis.
Prosigamos. Un mensaje u obra de arte es un concepto, es una
idea delineada con parámetros sincrónicos, es decir, cualitativos, modales y
relacionales. El tiempo, el espacio y la cantidad, al contrario, son parámetros
diacrónicos, perdurables, inmanentes o constantes en una obra de arte o mensaje
(‘specie’). Poco importa la fecha, el lugar y la cantidad en la pintura de Van
Gogh, que quiso hablarnos a su "modo" de las nuevas
"cualidades" del hombre al "relacionarse" con otros
hombres.
¿Cuál es el concepto antropológico que nos transmite Van
Gogh con su pintura? El hombre fue, es y será un ser social, diría el
desorejado. En la pintura vemos muchas personas, y todas o casi todas están
agrupadas. Tales agrupamientos nos dicen algo así: el hombre sólo percibe los
rasgos del prójimo con el que ha intimado, y toda alteridad desconocida es una
mera "opacidad".
Decía Sartre que la conciencia, para captar todos los
detalles de los cuerpos que percibe en el mundo, tendría que ejecutar un
proceso infinito de almacenamiento. Es imposible captar todos los detalles de
las cosas, y Van Gogh lo sabía, y porque lo sabía prefirió pintar la real
"opacidad" de un mundo idealizado. El panfletista, entonces,
preferirá usar cuerpos o rostros humanos "opacos" en vez de usar
rostros bien definidos.
Hablemos, ahora, de la ‘Wesenschau’. Dicha palabra significa
"intuición de las esencias". Todo mensaje tiene una esencia. Pero no
pensemos que la esencia es algo que está "detrás" de la existencia.
La "esencia" de un objeto está en su modo de aparición. ¿Cómo pasa un
objeto de la "opacidad" a la "claridad"? Sólo los fantasmas
se "aparecen". Las cosas van apareciendo, poco a poco, hasta tomar
forma. Cualquier objeto que haga lo contrario será un fantasma, un aparecido o
un espectro.
Vemos que Van Gogh prefirió ir de la oscuridad a la claridad,
cuando bien pudo haber preferido hacer lo contrario. Hacer lo contrario
siempre, es decir, buscar los "prodigios", es un pecado que a menudo
comete el artífice novato. Recomiendo que el lector lea el poema ‘Arte poética’
de Borges para que comprenda mejor este texto.
Una pintura es artística o "artificiosa" porque
logra interpretar, no imitar, la realidad. La pintura de Van Gogh nos dice que
el hombre siempre empieza en lo oscuro y termina en lo iluminado, y no al
revés. El arte siempre debe ser un impulso hacia arriba o hacia lo mejor.
¿Cómo le hacemos para que nuestro panfleto no deje de
interesarle al público? Aplicaré un concepto de la economía. No sé si lo que
haré está bien hecho, pero sí sé que Ezra Pound mezcló con fortuna menesteres
económicos con estéticos. ¿No es el buen uso de la materia un rasgo del gran
artista? Bueno, pues sigo. Hablemos de la "ley de la tendencia decreciente
de la tasa de beneficio". ¿Qué significa lo mentado? Significa que
mientras más veamos un cuadro menos placer nos dará éste.
¿Qué hizo Van Gogh para que su pintura jamás dejara de
darnos placer, placer epicúreo, placer fundamentado en el conocimiento y en la
memoria? Le dio movimiento a lo estático y paralizó lo que siempre se mueve. La
materia siempre ha hecho que los hombres pensemos metafísicamente, es decir,
más allá de lo material. Y lo humano, por su parte, siempre ha hecho que los
hombres pensemos teológicamente, es decir, en lo que está adentro del cuerpo.
¿Quién no quiere un alma eterna? ¿Quién no desea materia no
inerte? Los cuentos fantásticos de Disney animan cosas inertes, y hacerlo es
parte de nuestro instinto. Si observamos bien la pintura notaremos que lo
material delata una especie de movimiento molecular, delata eso a lo que los
griegos antiguos llamaban "simulacra" o "emanación de los
cuerpos".
La pintura de Van Gogh nos hace pensar en una "teoría
del conocimiento", nos hace especular sobre la "ilusión de los
trasmundos" nietzscheana. ¿Acaso Van Gogh no veía como veían los griegos,
que eran hombres que siempre estaban pensando en el movimiento de las
partículas? ¿Pensar como griegos o como Anaxágoras o como Demócrito no es
pensar primitivamente? ¿Y no es lo primitivo lo que está en el fondo de nuestro
cerebro, si me permiten usar mal una metáfora espacial?
Creo que con esta breve meditación todos los artistas
plásticos, desde panfletistas y dibujantes hasta publicistas y diseñadores
podrán comprender un poco mejor el uso del arte en la comunicación de masas.