“Tres pasiones, simples, pero abrumadoramente intensas, han gobernado mi vida: el ansia de amor, la búsqueda del conocimiento y una insoportable piedad por los sufrimientos de la humanidad. Estas tres pasiones, como grandes vendavales, me han llevado de acá para allá, por una ruta cambiante, sobre un profundo océano de angustia, hasta el borde mismo de la desesperación” — Bertrand Russell

Mostrando las entradas con la etiqueta Ortografía. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta Ortografía. Mostrar todas las entradas

11/10/12

A propósito de una polémica lingüística

El género no es sexo. El sexo biológico no se materializa necesariamente en sexo semántico
El sexo es una realidad biológica diferencial de los seres vivos, mientras que género significa “clase, tipo”

Ignacio M. Roca

Tras la tempestad llega la calma, y la polvareda que hace unos meses levantó el informe lingüístico del académico Ignacio Bosque (Sexismo lingüístico y visibilidad de la mujer, EL PAÍS, 4 de marzo de 2012) va perdiendo vigor y, así, el tema cayendo en el olvido. No debería, pues el asunto sigue muy vigente y posee importancia capital para la lengua.

El nudo de la cuestión es la idea asumida recientemente por parte del feminismo hispanohablante de que palabras de género gramatical masculino como vasco van referidas exclusivamente a varones, de manera simétrica a como el referente de sus correlatos de género femenino (vasca) se limita a mujeres. De ahí el ya célebre “doblete” “los vascos y las vascas” y semejantes, que tercamente persisten en labios de algunos políticos y personajes afines.