Productos como el petróleo, el cobre, la soja e incluso el
oro, entre muchas otras materias primas, no sólo son mercancías. Es decir, no
sólo son objetos que tienen un doble valor, de uso y de cambio, no sólo son
parte constitutiva fundamental del capital constante –es decir, de la inversión
capitalista-, sino que también son especial materia prima (valga la
redundancia) de la especulación financiera. Esto es, son mercancías
particulares que se comercian a futuro en mercados especiales. Las así
denominadas commodities son entonces mercancías cuyos precios no sólo están
sujetos a las determinaciones profundas de la formación del valor y los precios
de producción, no sólo están subordinados a los múltiples movimientos
superficiales del mercado, sino que también están particularmente expuestos a
los poderosos vaivenes de la especulación financiera. Todas estas
consideraciones son necesarias para empezar a hablar de los altisonantes
movimientos de los precios de las materias primas.
Condiciones generales
El descenso del precio de estas mercancías particulares, en
lo que va del año, se explica por una multiplicidad de causas, distintas para
cada uno de los casos. Existen no obstante al menos dos motivos que operan como
tendencias generales y afectan directa o indirectamente al conjunto de estos
productos. El primero de ellos es el ascenso de la cotización del dólar
norteamericano que encarece el precio de las materias primas nominadas en
dólares para los poseedores de otras monedas. El alza del dólar se explica a su
vez por al menos tres factores. El primero, la relativa solidez de la economía
de Estados Unidos, comparada con la debilidad de la mayor parte de las
economías de los países centrales. El segundo, la finalización de los programas
norteamericanos de inyección monetaria conocidos como facilidad cuantitativa
(Quantitative Easing), que implican una menor cantidad de moneda norteamericana
en circulación. El tercero, el fantasma de un posible aumento de las tasas de
interés en Estados Unidos a mediados del año próximo. Volviendo a las causas
generales, además de la revalorización del dólar, el segundo motivo general que
incide directa o indirectamente sobre el precio de las materias primas, es la
debilidad de la economía mundial y fundamentalmente sus perspectivas
declinantes. La combinación de estos aspectos imprime una tendencia contraria a
los precios crecientes de las materias primas que se impusieron desde el año
2010.
Crisis & crisis
No se puede establecer como regla general que toda crisis
capitalista mundial implica una caída en el precio de las materias primas. El
ejemplo más paradigmático es la crisis de los años ’70 mal denominada “crisis
del petróleo” por los extraordinarios incrementos de los precios del “oro
negro”. De hecho y por aquellos años, el incremento del precio del petróleo
contribuyó al aumento de la composición orgánica del capital fortaleciendo la
tendencia ya instalada a la caída de la tasa de ganancia. Pero sin ir tan lejos
y considerando el problema inversamente, los fuertes aumentos de los precios de
las materias primas desde el año 2009 no pueden adjudicarse al vigor de la
recuperación de la economía mundial durante los últimos años. Si una parte del
crecimiento de esos precios se debe sin duda a la recuperación de la demanda,
fueron en gran parte las formas particulares que adquirió una recuperación
débil, las que impulsaron un incremento de los precios de estas mercancías sin
correspondencia con los ritmos ni con los niveles de dicha recuperación.
Resulta significativo que tratándose de componentes fundamentales de la
inversión capitalista, los precios de las materias primas se hayan incrementado
de forma exorbitante en un contexto de dificultades para la reproducción
ampliada del capital -inversión capitalista- en particular en Estados Unidos.
La explicación es que las políticas de expansión monetaria de la Reserva
Federal Norteamericana, en un contexto de baja inversión y débil crecimiento
económico, provocaron una inundación de dinero en los mercados internacionales.
Estos flujos de dinero encontraron en los mercados a futuro de las materias
primas un lugar privilegiado para su “inversión” especulativa. Este es un
factor fundamental que explica la poderosa recuperación de los precios de estas
mercancías durante los años que siguieron a la Gran Recesión.
Particularidades
Las causas generales mencionadas más arriba no inciden de la
misma manera y con la misma potencia sobre las distintas materias primas. Por
ejemplo la caída del precio de la soja –que afecta fundamentalmente a la
Argentina- se encuentra particularmente influenciada por un factor estacional
como es una cosecha extraordinaria en Estados Unidos. La caída del precio del
cobre –que afecta en particular a Chile- está estrechamente asociada a la
desaceleración de la economía china así como a las incertidumbres generadas por
sus políticas tendientes a otorgar un menor peso a la inversión y una mayor
gravitación al mercado interno y por tanto a la producción de servicios. La
caída del precio del oro –que en sus características específicas de reserva de
valor requeriría un tratamiento aparte que no se abordará aquí- en términos
inmediatos, es una de las más contundentemente explicadas por las
características generales señaladas. Pero sin duda, uno de los fenómenos más
interesantes de este proceso se concentra en las causas particulares que
explican la caída del precio del petróleo.
Superproducción
petrolera
Desde mediados de junio, el precio del barril de petróleo
Brent cayó casi un 25% pasando de un valor máximo de 115 dólares a un valor de
alrededor de 87 dólares el barril. Quizá el caso de la caída del precio del
petróleo sea el menos relacionado directamente con las causas generales
expuestas. El descenso se asocia fundamentalmente a un incremento sostenido de
la oferta de crudo durante los últimos años, particularmente asociada a la
extracción de petróleo de esquistos o shale
oil por parte de Estados Unidos. El semanario inglés The Economist señala que desde principios de 2013 y
fundamentalmente a causa de Estados Unidos, la producción se elevó entre 1 y 2
millones de barriles diarios por encima del año anterior. La agencia
estadounidense de inteligencia Stratfor, por su parte, apunta que el incremento
de la producción de petróleo durante los últimos cuatro meses resulta
asombroso. Los Estados Unidos aumentaron su producción desde 8,5 millones de
barriles diarios en junio a 9 millones en la actualidad. Incluso, luego de un
crecimiento de la producción en alrededor de 1 millón de barriles diarios en
2012, 2013 y nuevamente en 2014, se espera que el próximo año, la producción
norteamericana vuelva a incrementarse en 750.000 barriles diarios. En paralelo
e igualmente según Stratfor, también Arabia Saudita, Nigeria e Irak
acrecentaron su producción en los meses recientes y la producción de la OPEP
está en su mayor nivel en 2 años. Pero las causas particulares se vuelven a
entrelazar necesariamente con las causas generales que recobran poder
explicativo. Las perspectivas de desaceleración de la economía mundial, de una
nueva recesión en Europa y el retorno del estancamiento en Japón, pronostican
una demanda de petróleo descendente que convierte al incremento de la
producción petrolera en tendencias a la superproducción. Según la proyección de
la Agencia Internacional de Energía, el crecimiento de la demanda de petróleo
para 2014, sería de 700 mil barriles diarios, lo que está bastante por debajo
del incremento de la producción señalado más arriba. Estas tendencias se manifiestan
–aunque todavía de forma velada- mediante elementos de guerras de precios. La
negativa de Arabia Saudita a recortar la producción arrastra el precio del
petróleo hacia abajo y aunque no en lo inmediato, podría amenazar la producción
norteamericana de shale, mucho más costosa que la producción tradicional. Y
resulta también que el petróleo, no es un commoditie más. Como también señala
la agencia imperialista Stratfor, se trata de la materia prima más importante
en términos de geopolítica mundial.
Título original: “Causas que
explican la caída del precio de las materias primas”
http://www.laizquierdadiario.com/ |