“Tres pasiones, simples, pero abrumadoramente intensas, han gobernado mi vida: el ansia de amor, la búsqueda del conocimiento y una insoportable piedad por los sufrimientos de la humanidad. Estas tres pasiones, como grandes vendavales, me han llevado de acá para allá, por una ruta cambiante, sobre un profundo océano de angustia, hasta el borde mismo de la desesperación” — Bertrand Russell
De qué hablamos exactamente? ¿De la moralidad de cazar elefantes u otros animales, algunos de ellos en extinción? ¿De la falta de información sobre las actividades del primer cazador del Reino? ¿De si tocan o no tocan estas prácticas en momentos de evidente desasosiego (pluri)nacional? ¿De conocer quienes somos los que pagan los caprichos del suegro del yernísimo? ¿De si el gobierno dio o no dio su visto bueno a una salida al exterior en la que algunos empresarios acompañaron felices y contentos y hablando de negocios y asuntos de “personalidades” a la primera autoridad del estado?¿De si son en broma o en serio las declaraciones del
príncipe Felipe al salir de la clínica sobre el no “poder parar quieto” del Rey
de España, su padre? ¿De la afición compartida, meméticamente inculcada, de abuelo y nieto mayor, quien probablemente
y a pesar de su tierna edad no es la primera vez que participa en concurridas
cacerías organizadas en la finca familiar de Soria? ¿De que ambos, abuelo y
nieto, seguían ingresados y restableciéndose en el momento en que su abuela y
esposa se iba de viaje a Grecia, a despejarse y a pasar el fin de semana? ¿Hablamos entonces de la “visita de doctor”, apenas veinte minutos, de la Reina
Sofía a su marido? ¿De las contradicciones entre las afirmaciones de la Casa
Real y las del principal partido institucional, el PPSOE? ¿El Rey tiene que
abdicar y así poder cazar elefantes sin problemas, o lo que le venga en gana,
como ha indicado el “izquierdista” Gómez, o de esto mejor no hablar como ha
señalado el felipista Rubalcaba? ¿Y don Felipe-Gas Natural sin decir nada?
Los dos candidatos a la presidencia de Estados Unidos
parecen tratar de gritar más fuerte que el otro en lo que concierne a Irán,
Siria, e Israel/Palestina. Cada uno de ellos alega que hace más por respaldar
los mismos objetivos. ¿No resulta entonces extraño que al momento no haya tal
contienda verbal en lo que concierne a Afganistán?
No hace mucho fuimos testigos del mismo juego
demócrata-republicano en torno a Afganistán. ¿Cuál era el partido más macho?
Recuerden el concepto de que una “oleada” de tropas podría ganar la guerra, un
concepto que el presidente Obama abrazó en su discurso ante la academia militar
estadunidense en diciembre de 2009. Ahora, repentinamente, desde marzo de 2012,
parece haberse convertido en un tema que nadie quiere impulsar en voz demasiado
alta.
En su reciente viaje furtivo a Colombia, el candidato de la
oposición afirmó que “Colombia ha logrado
reducir la violencia” y se refirió a Medellín como el ejemplo a seguir.
Conviene que HCR se informe mejor, porque si bien es cierto que hasta el 2007 venía reduciéndose la tasa de
homicidios en esa ciudad, como consecuencia de la salida del juego del capo del
narcotráfico Pablo Escobar y de la entrega
negociada con el gobierno de Uribe con el jefe narcoparamilitar de
Antioquia “Don Berna”, a partir de ese año viene incrementándose nuevamente el
índice de homicidios, el cual según cifras de la Policía Nacional llegó a 2.023
en el 2010, equivalente a 74.9 asesinatos por cada 100.000 habitantes.
Discurso de orden en conmemoración del 19 de abril de 1810
Yo tampoco quiero
imperios
Especial
para La Página
Nada es más bonito que la mañana en que comienzan una pasión
o una revolución. No la olvidamos nunca, volvemos siempre a ella preguntándonos
cómo pudimos ser tan afortunados o tan desdichados, cómo pudimos cometer tantos
errores por el lado de la sensatez o de la locura. Hace 202 años Santiago de
León de Caracas estaba a punto de ser flechada por la pasión revolucionaria, en
forma irreversible. Algunos califican a
la Caracas de 1810 de aldea
insignificante, sin peso en las cuestiones del mundo, dedicada apenas, según
Arístides Rojas, a comer, rezar y dormir.
Sin embargo, La Guaira es el primer puerto de importancia de las naves
que arriban de la metrópoli con impresos clandestinos, conspiradores y
noticias. La Historia gira sobre el torbellino de las corrientes y los alisios
del Caribe y del Atlántico. Desde 1492 se libra en él la Primera Guerra Mundial
por el dominio del globo.
Esta guerra se extiende por todos los océanos, dura
medio milenio, involucra a todas las
grandes potencias, y culmina hacia el siglo XVIII con una hegemonía de
Inglaterra que sólo declinará en 1939. Francia contribuye desde 1778 para que Inglaterra pierda sus colonias
en la Costa Atlántica. Desde 1789 ambos imperios están en mortal enfrentamiento
por un aparente debate entre monarquía y
República, cuya presa real son los mares
y los mercados del mundo.
“Carmina Burana”, del compositor alemán Carl Orff (Múnich,
1895-1982), es su trabajo más famoso, y un momento estelar de la composición
sinfónica del siglo XX.
Carmina Burana se basa en la homónima Carmina Burana, una
colección de cantos goliardos de los siglos XII y XIII reunidos en el
manuscrito encontrado en Benediktbeuern en el siglo XIX. Escritos por monjes y
juglares, la colección atrajo a Orff por lo diverso de sus versos que eran
tanto humorísticos, tristes o sugestivos. Entonces, eligió unos veinte al azar
y los arregló en crudas canciones para solistas y coro, acompañados por
instrumentos y mágicas imágenes.
Hay 3 sonidos
Este trabajo ejemplifica la búsqueda de Orff por un idioma
que pueda revelar el elemental poder de la música, permitiendo al oyente
experimentar esta expresión artística como una fuerza primitiva y abrumadora.
La poesía de los Goliardos, que no solamente cantaba al amor y al vino, sino
que también se burlaba de la clerecía, encajaba perfectamente en el deseo de
Orff de crear una obra musical que apelara a la «musicalidad fundamental» que,
como él creía, todo ser humano poseía.
“La valentía es un atributo tan natural del pensamiento como
el pensamiento es un atributo natural de la libertad.”Friedrich
Nietzsche
Diego Marín
Para todos, claro está. Al que le caiga el guante que se lo
plante. Con un guantazo, por cierto, desafío públicamente a un duelo de ideas a
unos específicos profesores de filosofía, a esos especímenes europeizados en
grado summa cum laude.
Video: La Gota Fría / Binomio de Oro
Pero me adelanto. Antes que nada, les cedo el privilegio de
escoger ustedes las armas porque yo traigo de todo, como Richie Ray. Aunque me
parece que ya las eligieron, tan solo con echarle una ojeada a sus programas
sobre la materia. Veo, veo, ¿qué ves? Mucho Jurgen Habermas, un exceso de
Gilles Deleuze, muchísimo Michel Foucault y una sobredosis de Gaston Bachelard,
pero ni un solo pensador latinoamericano, ni hablar de un colombianito, ya no
digamos un barranquillero.
La guerra de Afganistán es una irresponsable y criminal
aventura de exterminio imperial con enormes probabilidades de fracaso,
probablemente un segundo o tercer Vietnam, iniciada con un catálogo inabarcable
de mentiras, pseudoargumentos y falsas informaciones y con la finalidad real de
extender el poder geopolítico del Imperio y su dominio energético, guerra de
exterminio en la que se han generado prácticas como las siguientes [1]:
La campaña de reelección del Presidente Barack Obama lanzó
su primera publicidad en idioma español esta semana, justo después de regresar
de la Cumbre de las Américas. Obama estuvo tres días en Colombia, más tiempo
que ningún presidente en la historia de Estados Unidos. Sin embargo, el viaje
estuvo marcado por un escándalo de prostitución que involucra a las Fuerzas
Armadas y al Servicio Secreto de Estados Unidos. El General Martin Dempsey,
Jefe del Estado Mayor Conjunto del Ejército, declaró: “Decepcionamos al jefe, porque de lo único que se habla sobre Colombia
es de este incidente”. Dempsey tiene razón. El incidente también funcionó
como metáfora del modo en que el gobierno estadounidense trata a América
Latina.
En lo que algunos periodistas de su país sostienen que forma
parte de la campaña presidencial estadounidense, Barak Obama anunció el pasado
13 de marzo la presentación de un caso legal ante la Organización Mundial de
Comercio contra China, por las restricciones a las exportaciones de tierras
raras. La Unión Europea y Japón, que también se sienten perjudicados por las últimas
medidas tomadas por China, apoyan la iniciativa. China representa el 95% de las
exportaciones mundiales de estos minerales que son usados en productos que
contienen la tecnología más sofisticada y relacionada con lo que se conoce como
“tecnologías verdes”: turbinas para energía eólica, baterías, autos híbridos y
eléctricos y paneles solares. Pero también se usan en la fabricación de
smart-phones, pantallas de televisión y computadoras.
En el oficio de escribir se aprende rápido que, más útil que
tener una musa, es haberla perdido
Juan Forn
Se puede decir que entré en la literatura por un ascensor.
Me explico: cuando tenía quince, un vecino de mi edificio nos oyó hablar a mis
amigos y a mí en un viaje en ascensor, y nos invitó a su departamento en el
noveno piso. A partir de ese día empezó a pasarnos libros, recomendarnos
películas y ponernos discos, y poco a poco, en aquel living a media luz en
plena dictadura, nos hizo entrar a un mundo en el que James Dean le leía a
Marilyn el Ulises de Joyce, Dylan Thomas volvía de su última curda al Chelsea
Hotel, Coltrane intentaba llegar con su saxo hasta donde Charlie Parker había
comenzado su caída libre, Fitzgerald aconsejaba con su último aliento a
Faulkner que huyera de Hollywood, Pollock tiraba pintura como napalm en toda
tela que le pusieran delante, Sylvia Plath despertaba de su primer electroshock
y Burroughs le daba un balazo en la frente a su esposa jugando a Guillermo Tell
en una pensión mexicana.
La intervención de YPF y la introducción de una gestión
estatal de la empresa son medidas necesarias para comenzar a revertir la
depredación energética. Pero constituyen tan solo un punto de partida para
recuperar los recursos petroleros.
Durante una década REPSOL lideró el vaciamiento de pozos,
reservas e instalaciones pre-existentes. Extrajo lo máximo posible sin invertir
y expatrió ganancias en forma escandalosa. Esta conducta no irritó a ninguno de
los críticos neoliberales de la expropiación en curso. Ahora cuestionan la
“violación orden jurídico”, olvidando el total incumplimiento de los contratos
por parte de la firma. Esta doble vara es congruente con su habitual aprobación
de los atropellos contra los derechos de los asalariados o jubilados. Nunca extienden
a estos sectores los principios de la seguridad jurídica.
El escritor Günter Grass, de 84 años y autor de numerosos
libros que retratan el sufrido siglo XX europeo (El tambor de hojalata –novela
llevada al cine–, El gato y el ratón, Malos presagios, Mi siglo, entre otros
trabajos) publicó hace algunos días un poema, que se difundió en varios idiomas
en diarios y revistas de todo el mundo[1]. En Lo que debe ser dicho, Grass se
pregunta: “¿[…] por qué me prohíbo nombrar por su nombre a aquel otro país
donde hace ya años –aunque en secreto– hay disponible un creciente potencial
nuclear si bien fuera de control, puesto que es inaccesible a cualquier
inspección?” Y luego: “¿Por qué digo recién ahora, envejecido y con la última tinta,
que la potencia nuclear Israel pone en peligro la ya quebradiza paz mundial?
Porque debe ser dicho lo que ya mañana podría ser demasiado tarde”.
“Aquel otro país” es Irán, acusado por los países
imperialistas (Estados Unidos, y el mismo Estado de Israel) de estar en busca
de una bomba atómica propia. Grass denunció así el peligro de una conflagración nuclear
en Medio Oriente, y la polémica se desató de inmediato.