“Tres pasiones, simples, pero abrumadoramente intensas, han gobernado mi vida: el ansia de amor, la búsqueda del conocimiento y una insoportable piedad por los sufrimientos de la humanidad. Estas tres pasiones, como grandes vendavales, me han llevado de acá para allá, por una ruta cambiante, sobre un profundo océano de angustia, hasta el borde mismo de la desesperación” — Bertrand Russell

9/3/13

Damos gracias por tu luz, Hugo Chávez

Miguel Manzanera

Especial para La Página
La revolución bolivariana es imparable.  Ha puesto en marcha una dinámica de avance histórico y desarrollo social, en Venezuela y en todo el continente americano, que no podrá ser detenida porque representa la realización de las auténticas aspiraciones humanas.  Los impresionantes logros de esta revolución en materia de educación y sanidad, la mejora en las condiciones de vida del pueblo, así como en la protección de los derechos humanos, desarrollando al mismo tiempo la conciencia de la clase obrera y la dignidad ciudadana, son el germen y la promesa de un futuro más pleno para todos los americanos y toda la humanidad.

Hugo Chávez o el testimonio de una batalla inconclusa

Miguel Mazzeo

Hugo Chávez está bienaventuradamente muerto para el imperialismo y sus animales dóciles desparramados por todo el orbe, esos mismos que ya habían escrito su muerte en 2002, esos que nunca se cansaron de prodigarle insultos y odio de clase en sus versiones más descarnadas. El comandante Hugo Chávez está desoladoramente muerto para el pueblo pobre, para los oprimidos, los luchadores, los soñadores, de Venezuela y Nuestra América. El desamparo se puede leer en sus rostros, en sus ojos empozados de tristeza.   

Sus ampulosidades verbales, sus contradicciones, sus transacciones (algunas inevitables para quien ejercía el gobierno de un Estado periférico en este contexto histórico), las coexistencias pactadas que toleró, los funcionarios y figuras indefendibles que buscaron anular toda praxis antisistémica de los y las de abajo

Un héroe bajo la lluvia / El legado revolucionario bolivariano sobrevivirá a Chávez

Andrés Martínez Lorca
  • Gracias a mi amigo, el eminente catedrático español, profesor Martínez Lorca, por estas bellas palabras dedicadas a nuestro presidente Chávez
Como los viejos héroes griegos, Hugo Chávez luchó en pie hasta el final, sin rendirse nunca. Renacían sus energías tras los repetidos embates de la enfermedad, contagiaba su entusiasmo a sus colaboradores mientras los médicos afinaban la terapia, exprimía su organismo en la campaña presidencial con las escasas fuerzas que le quedaban. En el último mitin, rodeado de su pueblo, este soldado de la estirpe de Bolívar quedó solo bajo la lluvia, en pie, las manos cruzadas sobre el pecho y el rostro sereno como quien hace frente al destino. Así se ha ido en silencio el presidente que hizo nacer una nueva Venezuela y que inspiró esa Patria Grande de América Latina que ahora crece entre la admiración de un mundo cada día más expoliado por la rapacidad del capitalismo.

Se agiganta más la dimensión humana de Chávez


  • Lo dijo el compañero presidente encargado Nicolás Maduro, en ocasión del homenaje de sus exequias, “Comandante Chávez, no pudieron contigo”, esa es una verdad del tamaño de su grandeza, su muerte ha contribuido además a una concientización mundial muy importante
José Justiniano Lijerón

Pareciera un contra sentido, pero es una realidad viviente que después de la muerte física del compañero presidente Chávez, su pensamiento, su accionar, el humanismo, su capacidad y coraje junto a su patente  solidaridad sin condiciones, puesto todo al servicio de los más humildes de su país, así como de otros pueblos del mundo incluido a dos millones de pobres en los Estados Unidos  y sus desvelos por la unidad sudamericana, así como la necesidad de la multipolaridad del mundo, donde nadie tenga el poder absoluto de decidir por los demás.

8/3/13

Hugo Chávez: Una vida consagrada a la causa de los pobres

Oración fúnebre por Hugo Chávez / El comandante de los pobres

María Toledano

La muerte del presidente Hugo Chávez, Comandante de los pobres de Latinoamérica, nos encuentra de noche, hastiados tras un día más de miseria cotidiana y pútrido Occidente. Su fallecimiento nos encuentra a oscuras, lloviendo, indígena Caronte mágico, embajador de lo diverso, y de golpe certero, implacable enfermedad, acaba, al menos por unas horas, con la esperanza de los condenados de la tierra. Lágrimas de papel, tristeza y humedad tropical, corren por los barrios de Caracas, lamentos -como infinitas elegías- caen por las laderas, por los cerros, hasta inundar de sincero dolor las avenidas del centro, de Altamira. Bajaron una vez, mujeres y hombres, niños, armados de valor y palos, utensilios de cocina, para salvarte de las garras de la tiranía blanca, del golpe de estado petrolero, Comandante, y bajarán de nuevo, con las plurales tonalidades de lo negro en sus rostros, bajan ya de los cerros, del 23, de todos, a rendirte un homenaje consciente, fraternal. El luto se extiende por América, un luto intenso, del color del petróleo.

Hugo Chávez, el niño pobre de Sabaneta

Luis Hernández Navarro

Hugo Chávez fue un personaje de carne y hueso sacado de la más fantasiosa novela de Gabriel García Márquez. Niño pobre de Sabaneta ([población cercana a la] capital del estado Barinas) que juró no traicionar su infancia de escasez y precariedad, aprendió desde muy pronto a sembrar y vender golosinas. Hijo de maestros de primaria que creció con su abuela Rosa Inés y otros dos de sus hermanos, vivió en una casa de palma, con pared y piso de tierra, que se inundaba con la lluvia. Menor que soñaba con ser pintor y que traía en el alma la fantasía de jugar beisbol en las Grandes Ligas, se nutrió toda su vida de sus orígenes humildes. De la mano de su abuela, a la que llamaba Mamá Rosa, aprendió a leer y escribir antes de entrar a primer grado.

Chávez para siempre

Gustavo Márquez Marín
  • “Nos dicen los amigos del molino que acaba de morir el molinero. Enrique el grande ha muerto. No hay que llorar la muerte de un viajero. Hay que llorar la muerte de un camino".  Andrés  Eloy Blanco
Especial para La Página
Seguramente,  quienes desearon su muerte estarán frotándose las manos, celebrando la partida temprana del Camarada Hugo. Su miopía proverbial jamás les permitirá ver más allá del nicho de su conciencia alienada,  inoculada de un odio patológico por el mass media,  para apreciar en el corto plazo la dimensión de su legado histórico. Es la tragedia de quienes están atrapados, flotando  en el vacío de una dimensión individual ingrávida, en la que la ternura y los sueños de justicia y libertad están proscritos.

6/3/13

El luto de Venezuela

Álvaro Cuadra

Especial para La Página
La muerte de Hugo Chávez conmociona a Venezuela y a toda América Latina. Se puede haber discrepado de algunas de sus visiones políticas en el plano nacional o internacional, pero como suele suceder con los grandes líderes, nadie puede negar su estatura y su trascendencia histórica. Ha sido esta figura histórica la que ha encarnado el ideal del prócer Simón Bolívar y como él ha abrazado a todo un continente. Su muerte llena de dolor a muchos latinoamericanos en esta hora de luto y tristeza.

Chávez, corazón del pueblo

Alfredo Serrano
Todo se ha escrito sobre Chávez. Todo se ha dicho. Poco se puede añadir sobre este personaje de época que rechazó al neoliberalismo mucho antes que el mundo tuviera conciencia de sus efectos adversos para las mayorías. Es una persona que se jugó su vida por el pueblo allá por el 4 de Febrero de 1992, entendiendo que la rebelión popular del Caracazo no podía quedarse en el olvido. A Chávez no le importaron los dos años de cárcel por defender sus ideales. Chávez ganó las elecciones en Venezuela cuando aún la región estaba bajo el decálogo de Washington. Se atrevió a juramentar desafiando a los poderes constituidos, el 2 de Febrero de 1999, manifestando: "Juro ante Dios, ante la Patria, y ante mi Pueblo, sobre esta moribunda Constitución, que haré cumplir e impulsaré las transformaciones democráticas necesarias para que la República tenga una Carta Magna adecuada a los tiempos".

Chávez / Un legado de dignidad para un continente

Juan Carlos Monedero
"Chávez nuestro que estás en los pueblos". El pueblo, en la calle, reza por Chávez. La espiritualidad se mete en el corazón de los pobres. Tienen mucha necesidad. También se mete en su corazón la gente que se la juega por ellos. Y eso era Chávez: un hombre que se la jugó por su pueblo. Por su pueblo y por los pueblos de la América. Es con Chávez que los pueblos de América se han vuelto a reconocer. La oposición le criticaba la "regaladora" de dinero a los países hermanos. "Diplomacia del petróleo", la denostaban. Chávez sabía que no se salvaba un pueblo solo. Se tenía que salvar todo el continente. ¿No es eso lo que Europa le pide a Merkel? Pero Merkel no es Chávez. Hace falta gente honesta que reconozca que Chávez hizo lo que aquí estamos reclamando. Suramérica, hoy, llora pero crece. Europa sigue arrogante y se hunde.

5/3/13

El ron: legado del Caribe

Chef Roberto Silvestre

Especial para La Página
Tuve la bendición de haber nacido en una tierra, la República Dominicana, en donde los cálidos rayos del sol saludaban cada mañana  a los verdes cañaverales, cuales la suave brisa llegada desde las costas del mar Caribe dispersaba el aroma de la caña.  No había un tiguerito 1 que no saliera corriendo cada vez que transitaban los camiones cargados de caña de azúcar -que generalmente pasaban cerca de mi casa-  para recoger pencas que se caían, y minutos más tarde disfrutábamos gustosamente del sabor de la caña fresca mientras se escuchaban las carcajadas.

Como parte de mis investigaciones y estudios sobre el ron quiero compartir  con todos ustedes  una serie de micro reportajes  acerca de los diferentes tipos de rones disponibles en el mundo.