“Tres pasiones, simples, pero abrumadoramente intensas, han gobernado mi vida: el ansia de amor, la búsqueda del conocimiento y una insoportable piedad por los sufrimientos de la humanidad. Estas tres pasiones, como grandes vendavales, me han llevado de acá para allá, por una ruta cambiante, sobre un profundo océano de angustia, hasta el borde mismo de la desesperación” — Bertrand Russell

11/7/15

Onze (11) notes inspirées de la situation grecque

Il est urgent d’internationaliser la cause du peuple grec. Seul l’effacement total de la dette portera un «coup idéologique» au système européen actuel
Alain Badiou   |   1. Le «non» –Oxi– massif du peuple grec ne signifie pas un refus de l’Europe. Il signifie un refus de l’Europe des banquiers, de la dette infinie et du capitalisme mondialisé.

2. Une partie de l’opinion nationaliste, voire de la droite extrême, a voté aussi «non» aux exigences des institutions financières ? Au diktat des gouvernements réactionnaires européens ? Et bien, nous savons que tout vote purement négatif est en partie confus. L’extrême droite, depuis toujours, peut refuser certaines choses que refuse aussi l’extrême gauche. Seule l’affirmation de ce que l’on veut est claire. Mais tout le monde sait que ce que veut Syriza est opposé à ce que veulent les nationalistes et les fascistes. Le vote n’est donc pas un vote obscur contre les exigences antipopulaires du capitalisme mondialisé et de ses serviteurs européens. C’est aussi un vote qui, pour le moment, fait confiance au gouvernement Tsípras.

10/7/15

Mariátegui y el problema del indio, de ayer y de hoy

José Carlos Mariátegui ✆ Manuel Loaiza
Hugo Salinas   |   José Carlos Mariátegui, uno de los más brillantes intelectuales de su época, y por qué no decirlo, el científico social que, a su pesar, sus resultados de investigación se han convertido en dogmas, estuvo muy cerca de comprender la raíz del problema del indio. Y con ello, estuvo muy cerca de esclarecer el enigma del origen de la pobreza de las mayorías nacionales, de ayer y de hoy. De una manera directa, y sin ambages, en sus 7 Ensayos [i] comienza por precisar que “todas las tesis sobre el problema indígena, que ignoran o eluden a éste como problema económico-social, son otros tantos estériles ejercicios teoréticos –y a veces sólo verbales–, condenados a un absoluto descrédito. ” [ii]

Para el Amauta, el problema del indio es un problema económico-social. Y refuerza aún más su tesis diciendo que “la crítica socialista lo descubre y esclarece, porque busca sus causas en la economía del país y no en su mecanismo administrativo, jurídico o eclesiástico, ni en su dualidad o pluralidad de razas, ni en sus condiciones culturales y morales.” [iii]

9/7/15

El pensamiento de Hayek y la 'modernización' chilena


Friedrich August von Hayek
J.H. Darchinger
Jorge Vergara Estévez   |   El historiador Von Salis decía que nunca un proceso histórico consiste solo en la mera aplicación de una teoría social o política. Foucault asevera que hay una discontinuidad entre teoría y práctica, por tanto nunca podrían coincidir en la realidad. Sin embargo, hay procesos históricos en los cuales las ideas se “convierten en potencias materiales”, como decía Marx; no en el sentido del idealismo histórico que sostiene que ellas hacen la historia, sino que cuando son asumidas por un grupo social pueden convertirse en potencia de transformación de la sociedad. Con Marx se podría decir “son los hombres que hacen la historia, pero, en condiciones que no son determinadas por ellos” [i] y, en ciertas ocasiones, la realizan de acuerdo a proyectos basados en ciertas ideas.

La modernización chilena es un ejemplo de esto. La influencia de los teóricos neoliberales ha sido tan profunda que ha hecho del “experimento neoliberal” chileno” el más radical, extensivo, coherente durante cuatro décadas. La “revolución neoconservadora” de Reagan y Thatcher no cumplieron estas condiciones, como lo demostró Friedman [ii]. La influencia de estos autores permitiría, en cierto sentido, definir el carácter de la modernización capitalista chilena como una “modernización neoliberal” [iii].

Se ha destacado la indudable influencia de Friedman en la instauración de las políticas neoliberales en Chile desde su primera visita en 1975 [iv]. Su libro Capitalismo y libertad de 1962 ha sido tal vez el más influyente en los Chicago’s Boys, especialmente en sus políticas privatizadoras. Sin embargo, se puede demostrar que el ascendiente de Hayek fue tan importante como el de su antiguo discípulo y abarcó diversos aspectos.

De Marx a Hartz – Una historia de renuncias en el Partido Socialdemócrata Alemán (SPD)

El partido socialdemócrata más antiguo del mundo ha dejado atrás el marxismo, el socialismo, el Estado del Bienestar, a la clase obrera y ahora, a Grecia
Roger Suso   |   Escribir sobre la socialdemocracia es escribir sobre algo que ya fue. El partido socialdemócrata más viejo del mundo, el alemán, el Partido Socialdemócrata Alemán (SPD, por sus siglas germánicas), es hoy una caricatura de lo que fue. Un giro de 360 grados: de Karl Marx al liberal Friedrich Hayek, premio Nobel de Economía en 1974, pasando por Bodo Hombach, el ideólogo neoliberal del ex canciller Gerhard Schröder.

Pero situémonos justo después del Oxi (No, en griego) para radiografiar, de nuevo, a la socialdemocracia alemana, una socialdemocracia, cabe recordar, que comparte el Gobierno con la hegemónica canciller Angela Merkel. El primero en salir en público fue Martin Schulz. El presidente del Parlamento Europeo y una de las voces más poderosas dentro del SPD declaró en la televisión pública en prime time que "muy pronto Grecia va a necesitar ayuda humanitaria". El discurso del miedo. Una distorsión de la realidad y una manipulación del concepto. Como si Grecia fuese Sudán del Sur.

8/7/15

Grecia: El triste papel de la socialdemocracia

Núria Parlón, Beatriz Talegón & Enrique del Olmo   |   “En los momentos de crisis se descubre el verdadero eje del poder”, decía uno de los fundadores del socialismo, Federico Engels; pues bien, en este largo proceso de crisis en Europa y en su último epifenómeno —Grecia—, se ha desvelado por si hubiese alguna duda no sólo el verdadero eje del poder —los mercados financieros—, sino también todos aquellos que les hacen la ola una y otra vez.

Ríos de tinta corren sobre Grecia. Los apóstoles del pensamiento único del libre mercado se dirigen a los fieles desde los púlpitos que la prensa “libre” ha preparado para ellos. Las pizarras, tan de moda en el prime-time político actual, echan fuego. Sobre ellas, los expertos economistas escupen un dato tras otro, incansables en su labor evangelizadora, con el noble fin de que al ciudadano medio le quede marcada a fuego la ortodoxia del libre mercado. Una ortodoxia que señala a la propia Grecia como principal culpable de la crisis de deuda helena, y a sus responsables gubernamentales como radicales irreflexivos que se valen de la demagogia y el populismo para conducir al pueblo griego al abismo del desabastecimiento.

El nacimiento del neorrealismo italiano – 'Roma, Città Aperta'

Se cumplen siete décadas del estreno de “Roma, Città Aperta” (1945), la película de Roberto Rossellini que motivó el bautismo internacional del cine italiano de posguerra como neorrealismo, y que a nivel de lenguaje cinematográfico, en palabras de Jacques Rivette, “abrió una brecha por la que el cine entero debe pasar bajo pena de muerte”.

Manuel González Ayestarán   |   En plena ocupación nazi de Italia un director de cine católico (Rossellini) y un escritor comunista (Sergio Amidei) se reunieron para poner en común la voluntad de ser cronistas de su tiempo. Amidei comenzó a escribir el guión en junio de 1944 basándose en la historia real del sacerdote Luigi Morosini, el cual fue torturado y asesinado por colaborar con el Comité de Liberación Nacional. Rossellini por su parte comenzó a realizar tomas documentales de Roma cuando la ciudad aún se encontraba ocupada. Federico Fellini entraría algo más tarde a colaborar junto a Amidei en la elaboración del guión.

Juntos retrataron en el celuloide las ruinas que la historia dejaba en la capital italiana junto a aquellas personas que lo sufrieron, empleando un lenguaje cinematográfico espontáneo y liberado en el que primaban más los sentimientos y la vivencia de lo mostrado que las reglas de composición y el acabado de las escenas.