“Tres pasiones, simples, pero abrumadoramente intensas, han gobernado mi vida: el ansia de amor, la búsqueda del conocimiento y una insoportable piedad por los sufrimientos de la humanidad. Estas tres pasiones, como grandes vendavales, me han llevado de acá para allá, por una ruta cambiante, sobre un profundo océano de angustia, hasta el borde mismo de la desesperación” — Bertrand Russell

8/6/12

Analizando un discurso político

Eduardo Zeind Palafox

Especial para La Página
En medio del metálico tráfico y negándole la oportunidad de trabajar a un limpiador de parabrisas, a uno que quería embarrar mi coche con jabón, leí en cierta playera el siguiente mensaje: "A PESAR DE TODO, TE QUIERO, MÉXICO".

Este mensaje estaba estampado en la camiseta del limpiador de parabrisas. ¿Qué espera del gobierno un joven desempleado? ¿Qué puede hacer un joven de esta clase social para cambiar su situación? ¿Qué desea hacer con su vida dicho joven? ¿Cómo toma decisiones electorales este joven? Hemos transformado las preguntas antropológicas kantianas en preguntas de índole político. Para responder las anteriores preguntas, es necesario tener un sistema crítico, una herramienta de pensamiento. Cuando un gobernante habla, divide su discurso en tres secciones. Escrutemos.

Ya no soy Frederick Rolfe (ni el Barón Corvo), llámenme Adriano VII

Foto: Frederick Rolfe
Barón Corvo
 
Juan Forn

Había una vez un inglés muy atildado que tenía que dar un discurso en un club de gourmets, el primer club de gourmets que se abría en Londres: el Food & Wine Club. Le iba el pellejo en ese discurso. Era la primera reunión, necesitaban seiscientos socios para no quedar en la calle, no era buen año para quedarse en la calle 1931. Y, sin embargo, el atildado AJ Symons hizo su discurso sobre un pederasta loco, que intentó por todos los medios ordenarse cura luego de convertirse al catolicismo, y lo rechazaron por puto, malvivió como tutor, fue echado de todas partes, murió en 1913 en Venecia, debajo de una lona, dentro de una góndola fondeada en un embarcadero donde dormía hacía semanas. En el medio, este personaje escribió un libro increíble, llamado Adriano VII, en donde un pederasta loco era rechazado para el sacerdocio por puto y durante veinte años se sometía a un régimen de eremita piadoso hasta que del Vaticano venían a decirle que se habían equivocado, que les había dado una lección: que merecía los hábitos. Al mismo tiempo están eligiendo Papa en Roma y no se ponen de acuerdo hasta que llega a la mesa cardenalicia el relato de ese santo varón que durante veinte años creyó que merecía ser sacerdote. “Un hombre así necesita la Iglesia”, dice uno de los prelados. Los demás asienten. Habemus Papam. El pederasta devenido santo varón dice: “Ya no soy Frederick Rolfe. Llámenme Adriano VII”.

7/6/12

Un silencio clamoroso / África en los medios

Gerardo González Calvo

“Solo trato de llamar la atención, porque la atención es el único modo de conseguir que pasen cosas”, dijo el actor George Clooney cuando fue detenido ante la Embajada de Sudán en Estados Unidos.

Fue el 16 de marzo, tres días después de volver de Sudán y ver allí la escalada de la violencia contra el pueblo nuba. Poco antes, se puso en circulación por las redes sociales el vídeo Kony 2012 con el objetivo de forzar a Estados Unidos a intervenir para detener al ugandés Joseph Kony, dirigente del Ejército de Resistencia del Señor. Una vez más, parece que la salvación de África solo es posible desde fuera, porque ella sola no puede ni sabe resolver sus problemas. De estos dos acontecimientos noticiosos, me quedo con las palabras del actor George Clooney: “Solo trato de llamar la atención, porque la atención es el único modo de conseguir que pasen cosas”. Y me quedo con esta denuncia, porque es un alegato contra el silencio que pesa sobre África. Se podría incluso recurrir al oxímoron de “silencio clamoroso” para sintetizar la presencia de África en los medios de comunicación social de gran alcance en España. 

Las próximas elecciones en Grecia

Savas Michael-Matsas

Nos separan menos de dos semanas de las nuevas y decisivas elecciones parlamentarias del 17 de junio. El clima político está dominado por la polarización, los temores y las esperanzas. Las fuerzas que se enfrentan están polarizadas, principalmente, sobre la cuestión de ‘quién’ y ‘si’. ¿Quién prevalecerá? ¿La derecha, liderada por Samaras, o la Izquierda reformista Syriza, liderada por Tsipras? ¿Serán capaces de formar un nuevo gobierno para enfrentar la bancarrota del país?

Savas Michael-Matsas 
En la reciente elección del 6 de mayo, la ira popular y el rechazo masivo al ‘Memorándum’ de austeridad draconiana, acordado por los gobiernos anteriores y los principales partidos burgueses, hicieron explotar el viejo sistema burgués bipartidista de los últimos 38 años, luego del colapso de la dictadura militar. Las masas se han movido en forma decisiva hacia la izquierda, sobre todo en apoyo de Syriza, de su programa de rechazo al ‘Memorándum’ y por la formación de un gobierno de la Izquierda. Todos los esfuerzos y presiones de la UE, el FMI y los centros de poder político y económico locales para formar un gobierno de ‘emergencia de unidad nacional’, que incluyera a Syriza, fracasaron y se ha llamado a una nueva elección para llenar el peligroso vacío en la estructura del poder.

El espectro de la relación ambiente-desarrollo

Alfredo Portillo

Especial para La Página
Durante los pasados 31 de mayo y 1º de junio, se realizaron las XII Jornadas de Ambiente y Desarrollo, que tuvieron como sede los espacios de la Facultad de Ciencias Forestales y Ambientales de la Universidad de Los Andes (Mérida – Venezuela). En este evento, organizado por el Centro Interamericano de Desarrollo e Investigación Ambiental y Territorial (CIDIAT), participaron representantes de numerosas universidades nacionales y extranjeras, de organismos de gobierno  y de  organizaciones de la sociedad civil, quienes en conjunto presentaron 64 ponencias que definieron un amplio espectro de la relación ambiente-desarrollo.

Fueron dos intensos y provechosos días de intercambio de  información, de comprensión de la realidad ambiental de nuestro país y de otros países del mundo, y de propuestas para la solución de problemas puntuales, como un valioso aporte a la construcción de viabilidad para un desarrollo que se debe traducir en una mejor calidad de vida para los seres humanos o, como bien lo señaló en su conferencia inaugural el profesor Elías Méndez, para un desarrollo humanamente bien.

El Manifiesto Comunista es un éxito de ventas

A la luz difusa de la crisis económica y social europea, el "Manifiesto Comunista" de Karl Marx y Friedrich Engels se ha convertido en un insólito éxito de ventas para un continente aprisionado y a la búsqueda de una salida a la heterodoxia monetarista que como una camisa de fuerza impone sus mandatos, fundada en las hipotecas y las deudas de la burbuja financiera que explotó con violencia este año. Las revisiones de la obra de Marx no sólo llegan del campo de la economía (el análisis del capital del filósofo de Tréveris sigue siendo complicado de refutar), sino incluso de la historia en su versión teleológica, la más discutida en su momento.

En esta suerte de remake se ubican los libros de Slavoj Zizek, Alain Badiou, Jean-Luc Nancy y los pensadores italianos con Toni Negri a la cabeza, y dos pasos atrás, Franco Berardi, "Bifo", el teórico del semiocapitalismo y la producción intelectual. Esta recuperación de Marx para "tiempos posmarxistas" podría leerse, en rigor, como el retorno de lo reprimido de una política que se aplicó con fórceps donde ni siquiera Lenin sospechaba que pudiera tener éxito: también él pensaba en una burguesía antes que en el proletariado, y en países industrializados antes que rurales.

6/6/12

Oscuros augurios en Guatemala / Desgaste acelerado y violencia institucionalizada

Carlos Mérida (Guatemala) / Tzel y el Brujo
Carlos Maldonado

Especial para La Página
“Todo el mundo está harto de que no se respete la ley”. Esas fueron las palabras con las cuales el flamante Ministro de Gobernación, el militar Mauricio López Bonilla, justificó la represión contra los estudiantes normalistas que protestaban ayer en el Periférico, vía muy transitada de la ciudad capital de Guatemala, ante la iniciativa del gobierno a través del Ministerio de Educación de sumar dos años más a la carrera magisterial sin que ello haya sido discutido de manera profunda, amplia y consensuada con todos los sectores interesados.

Como siempre prevalece la imposición de quienes tienen más intereses mercantiles que pedagógicos, en este caso, sobre el diálogo. Similar a Santa Cruz Barillas, se quiere imponer a la fuerza el proyecto educativo como en aquel municipio se quiere imponer el proyecto hídrico que se sabe no favorecerá más que a la multinacional propietaria del mismo. 

Pierre Bourdieu / La distinción: Criterio y bases sociales del gusto

El sello editorial Taurus (España) publicó recientemente la reedición de una de las obras capitales del sociólogo francés Pierre Bourdieu y, en general, de la sociología: La distinción. Criterio y bases sociales del gusto. Esta nueva edición, la última data de 2000, se suma al cúmulo de publicaciones internacionales lanzadas con motivo del décimo aniversario luctuoso de Pierre Bourdieu.

Los sujetos sociales se diferencian por las distinciones que realizan —entre lo sabroso y lo insípido, lo bello y lo feo, lo distinguido y lo vulgar— en las que se expresa o se traiciona su posición. El análisis de las relaciones entre los sistemas de enclasamiento (el gusto) y las condiciones de existencia (la clase social) conduce así a una crítica social del criterio selectivo que es, inseparablemente, una descripción de las clases sociales y de los estilos de vida.

Podría comenzarse la lectura de este libro por el capítulo final, titulado «Elementos para una crítica “vulgar” de las críticas puras», que pone de manifiesto las categorías sociales de percepción y apreciación que utiliza Kant en su análisis del juicio del gusto. Pero lo esencial de esta ya clásica obra del sociólogo francés Pierre Bourdieu se encuentra en la investigación que, al precio de un enorme trabajo de encuesta empírica y de crítica teórica, conduce a una reformulación de todas las tradicionales interrogaciones sobre lo bello, el arte, el gusto y la cultura.

Patricio Aylwin / El político

@ Pawla Kuczynskiego
Álvaro Cuadra

Especial para La Página
Una distinguida caricaturista polaca llamada Pawla Kuczynskiego (1976), ha alcanzado premios y reconocimiento internacional por sus lúcidas sátiras del mundo actual. Su estilo nos trae reminiscencias de Magritte, mas su mirada crítica es muy contemporánea. Entre sus muchas obras, está  aquella que retrata al político de un modo tan nítido como elocuente. Una imagen que entre nosotros los chilenos ha adquirido una especial significación desde el llamado “retorno a la democracia” hace ya más de dos décadas. Las recientes declaraciones del ex presidente, señor Patricio Aylwin y su anunciado libro de memorias no hacen sino actualizar lo que es y ha sido la clase política desde hace muchos años en nuestro país. No es casual que la actividad política en la actualidad se encuentre tan degradada y desprestigiada. En este sentido, la equívoca figura del ex mandatario, no podría ser más apropiada como retrato del típico político del Chile republicano de la segunda mitad del siglo XX.

Como muchos de sus coevos, este personaje posee la impronta del dios Jano, y al igual que éste posee – a lo menos – una doble faz. Un acérrimo opositor al gobierno de la Unidad Popular encabezado por Salvador Allende que llevó a su partido, la Democracia Cristiana, como aliado en el CODE a apoyar el golpe de estado de 1973. El mismo, sin embargo, que encabezó el primer gobierno democrático “en la medida de lo posible”, tras la dictadura del general Augusto Pinochet.

5/6/12

San Petersburgo / Petrogrado / Leningrado = Datos de interés sobre la cuna de la inteligencia rusa

Antonio Rondón

Aunque muchos la conocieron en la época soviética como la emblemática Leningrado, por su gesta ante el bloqueo fascista, San Petersburgo muestra hoy todos los colores de la cuna de la intelectualidad rusa. Muchos ven a San Petersburgo desde los inicios del siglo XXI como la capital norteña de la Federación Rusa, el lugar de donde salió casi todo el equipo que acompañó a Vladimir Putin en el Kremlin o como el ya superado cliché de ser la ciudad criminal de la nación.

 Lo cierto es que la última década resultó para esa ciudad, fundada oficialmente en 1703 por el entonces zar ruso Pedro I, un paso a la modernización y remozamiento de sus principales perlas. Claro que cuando se dice San Petersburgo, también todos recuerdan al Petrogrado de la Revolución de Octubre, cuna de la transformación socialista soviética, una obra que inició en su tiempo Vladimir Ilich Lenin. Sería difícil recorrer sus calles sin palpar los momentos cruciales de una revolución que dio un vuelco total a la visión y construcción del mundo, una revolución de obreros, campesinos y soldados.

 La ciudad, tras los sucesos de octubre de 1917, dejó de ser la capital de lo que fuera en su tiempo el Imperio Zarista para retornar como centro del arte y la intelectualidad y fue conocida como Petrogrado hasta 1924, cuando se denominó Leningrado en honor a Lenin. El 6 de septiembre de 1991, la urbe retomó su original nombre de San Petersburgo en medio de los apabullantes cambios que trajo aparejada la desaparición de la Unión Soviética y el inicio del escabroso camino de la economía de mercado. Claro está, las joyas como el afamado museo Hermitage, con más de tres millones de piezas de arte, la plástica y la historia universal, el teatro Mariinski o lugares como la Fortaleza de Petropavlovsk y la Catedral de Isaac, conservaron y aumentaron su esplendor.

Indro Montanelli / Historia de los griegos

Este libro, de pequeñas dimensiones, pero de gran contenido, lo leí en 1977, cuando cargado de ilusiones, esperanzas y con mi incipiente familia a cuestas llegué a Roma por primera vez. En Historia de los Griegos, Indro Montanelli combina los rumores, las certezas, los mitos y sus propias conclusiones para ofrecernos no el más detallado de los retratos de los clásicos griegos pero, tal vez, sí el más vívido, el más estimulante, y para mí inolvidable. La prosa de Montanelli es ágil y alegre. Consigue ser el vehículo perfecto para hacernos creer que las 368 páginas que componen el libro son el testimonio verdadero de un hombre que estuvo allí, en Atenas, en Esparta, en Tebas. Discutiendo en las academias y liceos, coreando en los teatros y emborrachándose en las olimpiadas. Creo que este es un libro que se debería leer. Lo de Historia de los Griegos es otra cosa. Es un viaje que bien vale la pena hacer en estos momentos en que los griegos están escribiendo una nueva historia. ¿Quién mañana la reseñará?

A los lectores / Indro Montanelli

Leer el Capítulo I, PDF 
Me sería más fácil enumerar los vicios y defectos de este libro que sus méritos y cualidades. Antes de escribirlo, sabía que llegaría fatalmente a tal conclusión, pero lo escribí igualmente porque me divertía hacerlo, porque espero que alguien se divertirá leyéndolo y porque pienso que, pese a todas sus lagunas, llenará aquélla, mucho mayor, que nuestros profesores olvidaron colmar: narración sencilla, relato cordial. La he llamado Historia de los griegos porque, a diferencia de la de Roma, es una historia de hombres más que una historia de pueblo, de nación o de Estado.

Por esto he reducido a lo esencial la trama de los acontecimientos políticos para dar preferencia a los que determinaron el desarrollo de la civilización y jalonaron sus grandes etapas. En este libro, los poetas y los filósofos cuentan más que los legisladores y los caudillos; la huella dejada por Sócrates y Sófocles me parece más profunda que la dejada por Temístocles y Epaminondas.

No pretendo haber dicho algo nuevo ni haber dado a lo que ya es sabido una interpretación original. Y ni siquiera me lo había propuesto. Mi ambición ha sido la de proporcionar a los lectores un medio para acercarse sin fatiga, y sobre todo sin aburrimiento, a los antiguos griegos. Espero haberlo logrado.

Traducción de Domingo Pruna

Adiós Ollanta Humala / En el Perú ganaron los que perdieron y perdieron los que ganaron

Oscar Ugarteche

Tras la "masacre política” de diciembre del 2011, Ollanta Humala ha decidido convencer al mundo de que no solo es un militar sin palabra, sino un político con ideología neoconservadora. Este convencimiento se lo hizo primero a los venezolanos que lo apoyaron en la campaña del 2006 y luego a los brasileños que lo apoyaron en el 2011, y ahora lo viene llevando a la calle. No ha bastado “limpiar” a su gobierno de funcionarios progresistas, ahora es fundamental declarar la lucha de clases a la antigua, a balazo limpio. En distintas partes del Perú, y con el aplauso de la pintoresca y bravucona derecha nacional, Ollanta Humala y su gobierno se enfrentan y desafían al pueblo que ha votado por él. ¿Para qué?

Humala pretendió ser el caudillo progresista esperado en dos décadas. Participante del Foro de Sao Paulo, los partidos políticos de la izquierda latinoamericana lo acogieron y apoyaron en sus campañas diversas desde el 2005. La derecha lo acusó por todo esto de ser primero el candidato de Chávez y la señora Heredia fue perseguida por una parte de la prensa peruana a partir de las elecciones del 2006 por sus vínculos con Venezuela. Por esto tuvo de portavoces de campaña a Mocha García Naranjo y a Nicolás Lynch que venían de las izquierdas.