“Tres pasiones, simples, pero abrumadoramente intensas, han gobernado mi vida: el ansia de amor, la búsqueda del conocimiento y una insoportable piedad por los sufrimientos de la humanidad. Estas tres pasiones, como grandes vendavales, me han llevado de acá para allá, por una ruta cambiante, sobre un profundo océano de angustia, hasta el borde mismo de la desesperación” — Bertrand Russell

23/5/14

Venezuela y el doble rasero de los medios informativos occidentales

  • Mientras las violencias mortíferas que golpean el país desde febrero de 2014 son actuaciones de la oposición, los medios informativos occidentales persisten en acusar al Gobierno democrático de Nicolás Maduro
Salim Lamrani  |  Desde 1998, la oposición venezolana siempre ha rechazado los resultados de las elecciones democráticas, con una excepción: reconoció la legitimidad de su victoria en el referendo constitucional del 2 de diciembre de 2007, que ganó con un margen inferior al 1%. Así, la derecha se ha opuesto resueltamente a los gobiernos de Hugo Chávez de 1999 a 2013 y de Nicolás Maduro desde abril de 2013. Ha utilizado todos los métodos para derrocarlos: golpe de Estado, asesinatos

19/5/14

El retorno a Occidente del ‘enemigo interno’ de Martin Heidegger | La esencia de la represión que ha llegado

  • “El enemigo puede ser el tipo con el que se bebe un whisky”. | Robert Bentresque, militar francés experto en guerra antisubversiva [1]
Martin Heidegger ✆ EB
Alberto Rojas Andrade  |  De hecho constituye una especie de silogismo: si la globalización de la rapiña neoliberal ya toma con sus aciagos efectos el propio continente de origen del capitalismo, son previsibles allí reacciones de los desposeídos basadas en arraigadas tradiciones de lucha social contra aquel; por tanto, los poderosos han de desarrollar medidas crecientemente represivas para frenar un ambiente de cuestionamientos y renovada rebeldía; por ende, como el problema es común a naciones del norte del Atlántico, deben ser similares las precauciones adoptadas ante la resistencia a vivir y morir estólidamente dentro del capital y su corrupción, implicando necesariamente la construcción ideológica de la justificación de algún tipo de ‘amenaza interna’. El origen intelectual de esta no puede ser más inquietante.

Un artículo del diario londinense The Guardian, pone de presente el común denominador de obstaculización de la protesta legalmente garantizada en el hemisferio occidental, ubicándola en los accidentados terrenos de la ilegalidad, con el fin de castigarla mediante

16/5/14

Patria o colonia

Gustavo Márquez Marín  |  El artículo 129 del Código Penal establece: "El que dentro o fuera de la República Bolivariana de Venezuela, sin complicidad con otra Nación, atente por si solo contra la independencia o la integridad del territorio de la República, será castigado con la pena de presidio de veinte a veintiséis años. Con la misma pena será castigadoquien solicite, gestione o impetre, en cualquier forma, la intervención de un gobierno extranjero para derrocar el gobierno Venezolano". El MP debería actuar de oficio y tomar las medidas cautelares en contra de quienes se han dado a la deleznable tarea de solicitarle al gobierno de EEUU sansiones en contra de Venezuela, llegando al colmo de suplicar al Presidente Obama una intervención militar para ponerle fin a la “dictadura” del Presidente Constitucional Nicolás Maduro.

La gran contradicción de Thomas Piketty

Juan Ramón Rallo  | Tal suele decir al economista Tyler Cowen, si fueran ciertas las conclusiones de Thomas Piketty acerca de una tasa de retorno del capital que aumenta por encima del crecimiento del conjunto de la economía (su famosa desigualdad r>g), la propuesta de política económica más razonable no sería un impuesto global sobre la riqueza (tal como propone Piketty) sino la privatización de las pensiones estatales.

A la postre, si existe alguna tendencia subyacente que impulse a que la inversión se revalorice sobreproporcionalmente al resto de la economía, ¿por qué reprimir políticamente esa tendencia (impuesto sobre la riqueza) en lugar de permitir que toda la sociedad se aproveche de ella (privatización de las pensiones)? Extrañamente, Cowen acusa a Piketty de omitir cualquier referencia a la privatización de las pensiones como alternativa a su ambicionado impuesto sobre la riqueza. Pero no: en su libro, Capital en el siglo

15/5/14

Imperialismo e geopolítica | La lotta di classe nelle elezioni brasiliane

Marcos Aurélio da Silva  |  Gran parte del dibattito pubblico che si tenne all’interno alla sinistra alle presidenziali brasiliane del 2010 fu dominato dalla preoccupazione che la campagna elettorale fosse poco politicizzata, segnata dalla completa assenza di argomenti relativi a ciò che Gramsci (2002a) chiamava la "grande politica". E che questo difetto avrebbe colpito soprattutto il partito a capo della coalizione di governo. Vittorioso dal 2002, il Partito dei Lavoratori (PT), dalle lotte gloriose nel campo della sinistra fin da quando fu fondato, si presentava ora ─ ma già dalle sue prime mosse al governo, come sostiene un suo importante interprete (Coutinho, 2010) ─ con un discorso eminentemente tecnico, finalizzato solo alla gestione del capitalismo.

È probabile che la stessa tesi sarà nuovamente sostenuta per qualificare le elezioni presidenziali che si terranno quest'anno, in cui, ancora una volta, una coalizione guidata dal Partito dei Lavoratori (PT), nonostante i vantaggi di cui dispone, si prepara ad affrontare

El derecho penal y la lucha de clases | Una polémica con Roberto Gargarella

Matías Maiello  |  En el marco del consenso burgués con el curso ajustador del kirchnerismo, la reciente presentación del anteproyecto del nuevo Código Penal ha servido de arena privilegiada para la disputa entre los diferentes sectores del oficialismo y de la oposición burguesa, desatando una verdadera competencia por quién se ubica más a la derecha en el escenario político. Solo partiendo de esta realidad se puede entender que un anteproyecto de código que, por sobre los tintes progresistas, sostiene la criminalización de la protesta social, así como la penalización del aborto, que convivirá con la subsistencia de la privación de libertad sin sentencia firme (prisión preventiva) por la cual está preso el 70 % de la población carcelaria, etc., haya suscitado tanto encono por parte de la gran mayoría de los políticos burgueses y los grandes medios.

Thomas Piketty | Una receta socialdemócrata de progresividad fiscal que va para largo o para nunca

Foto: Thomas Piketty
Javier Doménech  |  Es el nombre de moda: Thomas Piketty. Publicó en francés el libro Le capital au XXIe siécle (El capital en el siglo XXI), título susceptible de evocar la obra magna de Karl Marx, El capital. Y de casi comunista han tratado a Piketty los conservadores estadounidenses cuando ha aparecido la traducción del libro al inglés, y con ello sus tesis han hecho irrupción en el debate mundial. ¿Qué tesis? La de que el sistema capitalista se ha demostrado bueno para crear riqueza, pero que lleva en su ADN el aumento creciente e imparable de las desigualdades sociales, algo que le sería intrínseco y que solo fue disimulado por determinadas circunstancias históricas durante parte del siglo XX (las dos guerras mundiales y cierta fiscalidad luego cuestionada). Cerrado el paréntesis, la brecha regresa a la tendencia expansiva. En expresión sintetizadora de Paul Krugman, Piketty nos advierte de que nos encaminamos hacia una sociedad dominada por la riqueza, mucha de ella heredada, más que por el trabajo.

Según los cronistas, lo que convierte en especialmente relevante el libro de Piketty es

14/5/14

Thomas Piketty y la teoría general del capitalismo salvaje

Marco Antonio Moreno  |  El nuevo libro de Thomas Piketty, Capital en el siglo 21 hace un trabajo notable para centrar la atención sobre el crecimiento de la desigualdad en las últimas tres décadas y advertir sobre el potencial riesgo de que aumentará aún más en los próximos años sino se hace algo para frenar esta situación que amenaza con hacer retroceder al mundo al siglo 19. Piketty aborda un punto básico muy simple y es que cuando la tasa de retorno sobre el patrimonio (r) es mayor que la tasa de crecimiento (g), se acelera la concentración de la riqueza.

Esto es lo que ha ocurrido en los últimos 30 años con la implantación a gran escala de los postulados del libre mercado y la desregulación financiera. Las fallas intrínsecas en los modelos de competencia perfecta que ocultan asimetrías y mercados imperfectos, ha creado un primer mundo en la periferia del tercer mundo y un tercer mundo en el corazón del primer mundo.

13/5/14

Thomas Piketty no es del agrado de la Casa Blanca

Foto: Thomas Piketty
Ángel Vallarino  |  El ensayo económico del momento, convertido en un auténtico bestseller en Estados Unidos, está despertando filias y fobias entre la elite política y financiera. El voluminoso libro del francés Thomas Piketty (El capital en el siglo XXI) se agotó en casi todas las librerías a finales del mes pasado y es ubicuo en la burbuja capitalina. La tipografía roja de su portada asoma a diario en los vagones del metro, en las cafeterías de la calle K, en los pasillos del Congreso y en las inmediaciones de la Casa Blanca. Por las noches, asesores, lobbistas, políticos y universitarios se sumergen en sus 600 páginas, o en algunos de los muchos resúmenes redactados desde que se publicó. Si todavía no saben de qué trata, en El Confidencial lo hemos analizado desde todas sus ópticas: la económica, la social y la política.

La nueva película de Lars von Trier | Nymph()maniac: del sexo y otros demonios

Octavio Fraga Guerra  |  Con un estilo que evoca influencias que van desde la Nueva Ola Francesa (Goddard, Truffaut) hasta sus primeros filmes del Dogme 95, Lars von Trier ha creado una magistral y cáustica pieza de arte pornográfico. Nymph()maniac: Volúmenes I y II (2013) es un ingenioso ensayo crítico sobre la sexualidad vista desde la óptica de una ninfómana; es también un caleidoscopio de soft porn donde el espectador participa de un acto de voyerismo, y en el que sus “tres niveles de conciencia” se funden en un continuo menage a trois de hipótesis, juicios morales y excitación.

La nueva película de Lars von Trier simplemente no podría encajar en el ambiente actual en el que la separación entre iglesia y estado, y las conquistas sociales resultado del ímpetu de la liberación sexual iniciada el siglo pasado (el aborto, el matrimonio gay, etc.) están bajo constante peligro de ser revertidos por una agobiante presión conservadora. A principios del siglo XX, Alexandra Kollontai —destacada revolucionaria bolchevique— escribía

10/5/14

Los datos improbables de Thomas Piketty

Hunter Lewis  |  El libro fundamental de Keynes, La teoría general, está cargado de teoría económica. Solo hay dos páginas de datos en ese libro y Keynes rechaza los escasos datos que cita como “improbables”. Por el contrario, el nuevo libro de Piketty, Capital in the Twenty-first Century, está trufado de datos. De hecho Piketty se considera a sí mismo un sucesor del economista cuyos datos rechazaba Keynes, Simon Kuznets. Casi todos admiten que el alegato teórico de Piketty es flojo, pero sus defensores dicen, mirad todos estos datos. ¡No podéis argumentar con toda esta masa de evidencias históricas!

English
El principal argumento de Piketty es que la riqueza (que tiende a estar concentrada en pocas manos) crece más rápidamente que la economía, así que los que tienen un montón de riqueza se mantienen siendo ricos respecto de todos los demás. Esta se supone que es una característica inevitable del capitalismo. (Si esto suena familiar, debería serlo. Recuerda tanto a Marx como

El pánico a Thomas Piketty

Paul Krugman  |  El nuevo libro del economista francés Thomas Piketty, El capital en el siglo XXI, es un prodigio de honestidad. Otros libros de economía han sido éxitos de ventas, pero, a diferencia de la mayoría de ellos, la contribución de Piketty contiene una erudición auténtica que puede hacer cambiar la retórica. Y los conservadores están aterrorizados. Por eso, James Pethokoukis, del Instituto Estadounidense de la Empresa, advierte en National Review de que el trabajo de Piketty debe ser rebatido, porque, de lo contrario, “se propagará entre la intelectualidad y remodelará el paisaje político-económico en el que se librarán todas las futuras batallas de las ideas políticas”.

Pues bueno, les deseo buena suerte. Por ahora, lo realmente sorprendente del debate es que la derecha parece incapaz de organizar ninguna clase de contraataque significativo a las tesis de Piketty. En vez de eso, la reacción ha consistido exclusivamente en descalificar; concretamente, en alegar que Piketty es un marxista, y, por tanto, alguien que considera que