Ícaro moderno ✆ Michael Austin |
Especial para La Página |
¿Es útil anular el voto? Roger Bartra vuelve a las andadas e
intitula un artículo de su autoría con la anterior e inocentona pregunta. ¿Por
qué? Porque pretende convencernos con su prosa poética, mezclando el
utilitarismo con la técnica. El poeta Pasternak ha dicho con solemnidad que los
tiempos modernos tienen que ser narrados con prosa, no con poesía, no con prosa
iluminada.
La poesía es fragmentaria y el mundo actual es harto
complejo, aunque también es harto incompleto. ¿Incompleto? Sí, incompleto, pues
faltan instituciones, ideólogos, intelectuales y naciones dignas del respeto.
En un pequeño libro que leí hace muchos años, aprendí que una buena manera para
promover la democracia es la abstención (recomiendo leer a A. Badiou, leer su
libro Circunstancias). La democracia, como la República de Platón, es una teoría
política, es un ideal. La democracia no es un instrumento, no es un método, no
es un proceso. Pensar que la democracia se ejerce votando, es como pensar que
la bondad yace en los medicamentos que nos receta el médico (primun non
nocere). No confundamos la técnica con la teoría, las ideas con las acciones,
las decisiones con los planes.