15/5/97/ - Süddeutsche
Zeitung, Alemania: Es recomendable hablar cada tanto con su compañero de
trabajo
Los directivos de una empresa de publicidad intentan
averiguar por qué nadie se percató que uno de sus empleados estuvo muerto
sentado en su mesa de trabajo durante cinco días sin que nadie se interesara
por él ni le preguntara qué le ocurría. Michael Messerschmitt, de 54 años de
edad, quien trabajaba como revisor de estilo en una empresa de Munich desde
hacía treinta años, sufrió un paro cardíaco en la oficina que compartía con otros
veintisiete trabajadores.
El lunes por la mañana llegó a trabajar y discretamente se
ubicó como siempre lo hacía en su cubículo reservado, pero nadie notó que no se
marchó nunca hasta que el sábado por la mañana el personal de limpieza se
preguntó qué hacía trabajando el fin de semana. Su jefe, Karl Weinachst,
declaró: "Michael siempre era el primero en llegar por la mañana y el
último en marcharse por la noche, por lo que a nadie le pareció extraño que
estuviera continuamente en su sitio sin moverse y sin decir nada. Era bastante
reservado y su trabajo le absorbía."